Acumuladores de gel

Funcionamiento:

A diferencia de las baterías de plomo-ácido, en las que se produce una pérdida de agua durante el ciclo de carga, en las baterías de gel se recombina el oxígeno liberado por las placas positivas con el hidrógeno, a través del electrolito, y por reacción electroquímica se convierte en agua.

De esta manera se hace innecesaria la adición de agua durante toda la vida de la batería.

Componentes:

Placas positivas

Constituidas por una serie de tubos de poliéster, material resistente al ácido y de alta porosidad, que sirven de soporte a una gran cantidad de materia activa formada por óxido de plomo de esmerada elaboración.

Placas negativas

Son del tipo empastado, formadas por una rejilla de aleación de plomo que sirve de soporte eficaz a la materia activa por su especial diseño. Su rendimiento es equivalente al de las placas positivas a las que acompaña.

Separadores

Son de plástico microporoso inalterable a la acción del ácido sulfúrico y de una elevada porosidad.

Terminales

Por su diseño deben de eliminar toda posibilidad de corrosión y garantizar la absoluta estanqueidad entre el interior y exterior del elemento.

Recipiente y tapa

De plástico de alta resistencia a impactos e inalterables al ácido. Deberían incorporar válvulas de seguridad para facilitar la salida de gases al exterior en caso de sobrepresión producida por una carga incorrecta.

Electrolito

Constituido por una solución de ácido sulfúrico que se presenta en forma de gel debido a la adición de una sílice especial.

Fuente: Guía técnica de aplicación para instalaciones de energías renovables del Gobierno de Canarias