Antonio Vivaldi

Nació el 4 de marzo de 1678 en Venecia y se formó con su padre, violinista en la catedral de San Marcos. Entre 1693 y 1703 estudió para sacerdote con los padres de San Gimingano y tras ser ordenado, obtuvo el puesto oficial de maestro de violines en el Ospedale della Pietà, que era una institución especializada en educación musical para niñas huérfanas. Trabajó allí como director musical y profesor hasta 1740.

A su vez que componía conciertos y oratorios para las representaciones semanales con los que obtuvo gran reconocimiento.

A partir de 1713 también trabajó como compositor y empresario de óperas en Venecia y viajaba a Roma, Mantua y otras ciudades para supervisar las representaciones.

Entre 1729 y 1733 visitó Viena y Praga y entre 1733 y 1735 compuso varias óperas para el Teatro Grimani, con las que dio por terminada su relación con Venecia.

A partir de entonces promovió sus óperas en ciudades más pequeñas como Verona, Ancona o Ferrara. Hacia 1740 entró al servicio de la corte del emperador Carlos VI en Viena.

Falleció en esta ciudad el 28 de julio de 1741.