Aparición del cine sonoro

En los años veinte surge una nueva tecnología que permite a los cineastas agregar una banda sonora a los films, ya sea se trate de diálogos, música o efectos sonoros, que aparecerán sincornizados con la imagen en movimiento.

Aunque no fue la primera película hablada, una de las más famosas en los años 1920 fue el El cantante de Jazz de 1927, que usó el formato Vitaphone, aunque ya la película Don Juan, de 1926, fue la primera que incorporó sonido (esencialmente efectos especiales y música original).

Fuente: Apuntes de Diseño contemporáneo de la U de Londres.