¿Cama plana o tambor?

Hace muchos años, en algún lugar de las Artes Gráficas, aprendimos que el estándar de calidad para digitalización de imágenes lo imponían los scanners de tambor horizontales. De esto no existe la menor duda y los años lo han demostrado así.

Sin embargo, la tecnología avanza y conforme lo hace, trae a su paso nuevos productos que están revolucionando la industria. A la fecha, los scanners de tambor siguen gozando de una reputación de alta calidad y productividad, pero el número de unidades de este tipo, que se producen ha disminuido considerablemente.

Además de por sus diferentes niveles de desempeño, los scanners de tambor se clasifican también por su tecnología basada en fotomultiplicadores y su capacidad de captar el máximo detalle en las imágenes.

Sin embargo, a lo largo de los últimos meses se han introducido al mercado equipos de cama plana capaces de hacer a un lado a sus antecesores.

Los equipos originales de digitalización eran tambores horizontales que podían ocupar toda una habitación, con sistemas de humedad y temperatura controlada, infinidad de controles manuales y con costos que promediaban los cientos de miles de dólares.

Los equipos de tambor que se siguen produciendo actualmente se han modernizado con sistemas digitales y físicamente menos demandantes, en lo que a tamaño y temperatura se refiere. Estos aparatos normalmente cuentan con una resolución óptica de 10,000 dpi y un rango dinámico de 4.0 o mayor, lo que los hace ideales para digitalizar imágenes a imprimir en lineajes arriba de las 200 líneas por pulgada o en su caso, para originales a ser amplificados en más de 1 000 por ciento.

Una innovación reciente a la línea de los scanners de tambor, que ha intentado unir lo mejor de dos mundos, son los tambores verticales. Éstos ofrecen las mismas áreas grandes de digitalización y productividad que los tradicionales, pero ocupan menos espacio en el lugar de trabajo y al mismo tiempo cuestan menos que los anteriores.

Hoy sólo dos fabricantes cuentan con equipos con este tipo de tecnología –la división de preprensa de Heidelberg e ICG– lo que los hace equipos que ocupan un pequeño nicho de mercado.

Los scanners de tambor de escritorio fueron introducidos como un puente entre los equipos tradicionales y los de cama plana de baja resolución.

La finalidad era utilizar la tecnología de fotomultiplicadores para lograr la calidad de imagen y al mismo tiempo ofrecer una interfaz sencilla con los equipos de cómputo para Desktop Publishing y un precio competitivo.

Para lograr esto se tuvo que sacrificar la productividad, por el número de transparencias que podían ser montadas en estos pequeños tambores.

Con los últimos avances en tecnología de digitalización, los equipos de cama plana se han vuelto muy competitivos en comparación con los sistemas de tambor para escritorio. El último grito de la moda en lo que a digitalización se refiere, es la tecnología «xy» con una variación «xyz» que incluye un zoom.

La manera de funcionar de los equipos de cama plana era posicionando el sensor CCD en el centro de la cama del scanner y utilizar afuera espejos o lentes para afocar o comprimir grandes áreas deimagen, y para obtener una buena calidad era necesario posicionar el original en un punto determinado.

Limitar el posicionamiento de dichos elementos afectaba directamente en la productividad del flujo de trabajo. Otra de las desventajas de esta tecnología es que cuando los originales a digitalizar son mayores al tamaño ideal del equipo, las esquinas de la imagen tienen menor calidad.

La introducción de la tecnología «xy» ha permitido posicionar el lector o sensor CCD en un punto determinado de la cama del equipo. Anteriormente, la barra lectora se movía sólo en una dirección -largo- en un área bidimensional. Ahora, este nuevo concepto que permite al CCD moverse en dos direcciones -largo y ancho-, ha dado pie al término «xy» y se ha adoptado para definir este tipo de scanner.

A pesar de lo innovadora que es esta manera de digitalizar, sigue existiendo una limitante: al ser los originales mayores que el CCD, todavía es necesario utilizar óptica para compensar el ancho del sensor.

En la actualidad, sólo dos marcas de equipo ofrecen la capacidad de digitalizar con la mayor resolución óptica sin importar el tamaño del original. Esto se logra al digitalizar en franjas del ancho del sensor sin importar la del original y después coser digitalmente todas esas pequeñas imágenes digitales.

Independientemente que sea cama plana o tambor, estos equipos pueden tener especificaciones similares pero costos muy variables. Además de la calidad de los sensores y tamaño del área de los mismos, un factor diferente también puede ser el software que acompaña a estos equipos.

Otros factores que pueden afectar la calidad y por lo tanto, la variación en precio, son la pureza de la fuente de luz, la calidad de la óptica, los espejos y procesos de manufactura de los vidrios o tambores utilizados. Naturalmente, cada equipo contiene características que los diferencia de los demás y depende de cada caso, el escoger el equipo adecuado para nuestro flujo de trabajo.

Es importante destacar que la digitalización de imágenes es un arte y que los conocimientos requeridos para obtener buenos resultados son amplios y aunque la tecnología lo hace parecer muy sencillo, por existir en el medio muchos equipos de bajo costo, éstos normalmente van relacionados con su calidad.

Recordemos que si no empezamos con un buen producto -digitalización-, difícilmente acabaremos con uno de calidad.

Fuente: Materia de Preprensa Digital de la Universidad de Londres