Como expresión de pueblos primitivos

Al comienzo de las civilizaciones, el cuento brotó del sentimiento de muchedumbres ignorantes, quienes transmitieron de padres a hijos consejas mediante las cuales se explicaban el comportamiento de la naturaleza o, bien, aclaraban cuestiones vitales que los desasosegaban.

Los primeros hombres, a pesar de su rudeza, pulieron sus expresiones a fin de permitir al oyente el ingreso al mundo mágico de las cosmogonías.

El cuento como relato imaginario interpretativo de la naturaleza, en un principio fue de tipo religioso y mítico (La historia del náufrago); después aparecieron los heroicos (Los dos hermanos); luego, los folclóricos (Las ocas salvajes); y al final, los regionales (El pájaro que habla).

Junto con la mitificación, el cuento desarrolló un carácter educativo y se convirtió en fábula, apólogo, parábola y ejemplo.

El tema de la mitología, obligado para la mejor comprensión de la literatura clásica, lo trataremos en la unidad 6, aquí diremos algo de él en forma breve, sencilla y esquemática.

La mitología (del griego mythos, fábula) consiste en el conjunto de consejas de un pueblo asociadas con creencias religiosas. Dichas consejas se transmiten oralmente y, cuando el pueblo llega a los niveles de la escritura, se convierten en una parte de la literatura nativa.

Por lo general, la mitología contiene tres tipos de relatos: los mitos, las leyendas y los cuentos populares.

Los mitos intentan explicar un fenómeno natural o una práctica de la sociedad, por ejemplo, entre los griegos, para explicar la salida diaria del Sol, imaginaron el mito de un cochero que por la noche, sumergiéndose en el océano, transportaba en una barca un tiro de flameantes caballos hacia el otro lado de la Tierra.

Las leyendas, aun cuando sus detalles son ficticios, tienen cierta base histórica y pretenden conservar la memoria de un suceso que fue muy notable.

Los cuentos populares difieren de los mitos y de las leyendas en que su finalidad es simplemente el entretenimiento, sin importar que, en ellos haya matices morales y didácticos.

Fuente: Apunte de Comunicación escrita de la U de Londres.