Cuidados de enfermería en las hemorragias de la segunda mitad de la gestación

Preventivos

Prevención primaria: debemos informar de los factores de riesgo.

Además se establece una prevención secundaria sobre los síntomas y complicaciones y se procura una detección precoz y vigilancia ecográfica. Reposo en placenta previa para evitar hemorragias.

Registros de enfermería

1. Valoración del estado materno: debemos vigilar signos de hipovolemia, constantes y estado general. Psicológicamente valorar miedos, ansiedad y temor.

2. Valoración del dolor: localización, intensidad y ritmo del dolor y evaluación uterina en desprendimiento de placenta.

3. Valoración fetal: registro cardiotocográfico en ambos casos. En placenta desprendida resulta difícil a causa de la hipertonía uterina.

4. Evaluación obstétrica: Contraindicado tacto vaginal en placenta previa, por riesgo de hemorragia. Se harán ecografías en ambos casos.

Cuidados terapéuticos

1. Maternos: reposo corporal en decúbito en caso de placenta previa, absoluto e incluso ingreso hospitalario si los episodios hemorrágicos son intensos y frecuentes.

Reposo o abstinencia sexual. Psicológicamente identificar miedos, temor y ansiedad contrarrestándolos con información adecuada y comprensible, apoyo del padre y compañía de la familia.

Cuando haya reposo establecer un sistema de refuerzo de la motivación cuando el período de reposo sea largo.

2. Fetales: monitorización cardiotocográfica y extracción del feto del útero valorando el grado de madurez fetal y la viabilidad extrauterina:

a) Desde la semana 33-34 la conducta debe ser expectante, y se valora la administración de corticoides para acelerar la maduración pulmonar fetal.

b) Desde la semana 34 a 37 se valora la situación fetal y materna, si hay hemorragia y la situación de la placenta.

c) Mas allá de la semana 37 no se espera y se practica una cesárea.

Fuente: Apuntes y notas de enfermería materno infantil del Conalep