Infección puerperal (postparto)

Se da en 3-4% de puérperas. Fiebre puerperal es el aumento de la temperatura ≥38°C, no obstante debe estar fuera de las primeras 24 horas tras el parto y durar más de dos días.

Tiene como puerta de entrada el aparato genital, o puede producirse por gérmenes que habitan en la madre (microorganismos endógenos procedentes del tracto genital, aparato urinario, mamas o vías respiratorias altas) como Escherichia coli, Streptococcus faecalis y Clostridium), o por infecciones nosocomiales (Streptococcus beta hemolítico y Estafilococcus aureus).

Manifestaciones Clínicas

Dependen de la forma clínica que adquiera:

1.- Endometritis, afecta a la cavidad uterina.
2.- Salpingitis, afecta a las trompas.
3.- Pelviperitonitis (peritoneo de la pelvis obstétrica).
4.- Celulitis pélvica (afecta al peritoneo pélvico y los parametrios, o sea, los espacios pélvicos).
5.- Tromboflebitis pélvica, se da a nivel vascular.
6.- Peritonitis generalizada, afectación de la cavidad peritoneal.

Manifestaciones clínicas de la infección puerperal

1.- Temperatura y pulso aumentados. A veces la elevación de la temperatura es de forma súbita.
2.- Malestar y cansancio.
3.- Útero blando y doloroso (subinvolucionado si la infección se encuentra en él).
4.- Loquios abundantes y fétidos, cuando la infección es grave incluso purulentos.
5.- Aumento de temperatura y dolor abdominal. Si la infección no se trata puede haber trastornos digestivos.

Intervenciones de enfermería

1.- Aislamiento hasta que se normalice la temperatura y comience el tratamiento.
2.- Antibioticoterapia (suele ser muy eficaz).
3.- Analgésicos.
4.- Control de constantes (pulso, temperatura, TA y FR).
5.- Medidas de confort físico y para reducir la fiebre.
6.- Higiene de genitales varias veces al día y cambio frecuente de compresas.
7.- Información y educación sobre evolución y autocuidados.
8.- Evitar infecciones cruzadas.

Fuente: Apuntes y notas de enfermería materno infantil del Conalep