Información que recibe y emite un ordenador

Una vez considerados los elementos que forman la estructura básica de un  ordenado; vamos a ocuparnos de la información que reciben, almacenan, procesan y vuelven a enviar al exterior. Para ello se distinguen dos tipos fundamentales de información, las instrucciones y los datos. Las instrucciones son comandos de tipo explícito que por un lado especifican las operaciones (aritméticas o lógicas).

Deben llevarse a cabo y por el otro gobiernan la transferencia de la información en el interior del ordenador y entre éste y las unidades de entrada/salida (periféricos) conectados a él.

De este modo, un conjunto de instrucciones destinadas a realizar una tarea concreta forman lo que se denomina programa. Por regla general, el método seguido para el procesamiento consiste en almacenar uno o varios programas en la unidad de memoria, de donde el procesador recupera las instrucciones que corresponden al programa para llevar a cabo las operaciones encomendadas.

El orden con el que se ejecutan las instrucciones es, por lo común, el de la secuencia de almacenamiento, si bien puede varían. De este modo, el programa almacenado en la unidad de memoria es el que controla la totalidad del comportamiento del  ordenador, aunque existe la posibilidad de que tanto el operador humano externo como los dispositivos periféricos conectados ala máquina lleva a cabo una interrupción externa.

Por su parte, los datos son los números y caracteres codificados que se emplean a modo de operandos en la ejecución de las instrucciones pero también abarcan a toda información digitalizada. Sin embargo, en el proceso de compilación en el que un compilador traduce el programa fuente a lenguaje máquina el propio programa a fuente es considerado como un conjunto de datos.

La información que recibe un ordenador debe esta convenientemente codificada ya que, como se a indicado, los sistemas físicos (máquinas) actuales se basan en los circuitos digitales y éstos conocen tan sólo dos estados (0 y I, o abierto y cerrado, etc.).

Así, para los datos se emplea la codificación en el sistema binario mientras que  para los caracteres alfanuméricos se emplean internacionalmente ciertos esquemas concretos de codificación como pueden ser el código ASCII (American Standard Code for Information Interchange, código estándar americano para el intercambio de información), en el que cada carácter se representa mediante un código de siete bits, y el EBCDIC (Extended Binaiy—Coded Decimal Interchange Code) en el que se emplean ocho en lugar de siete bits para representar un cierto carácter.