Introducción al estudio de la Historia

La historia es una ciencia social y el sujeto de la historia es el  hombre mismo. Marc Bloch, historiador francés fundador de la Escuela de los Annales, afirmaba que la historia es “la ciencia de los hombres a través del tiempo”. La histografía es el registro escrito de lo que se conoce sobre las sociedades del pasado. En occidente se atribuye al pensador griego Herodoto (siglo V a.C.) el título de “Padre de la Historia” por qué cumplió la función de observador y testigo de lo que veía para narrarlo.

No obstante, sólo hasta el siglo XIX, cuando se empezó a estudiar la historia tomando como tema central los datos, los personajes y sus acciones, y se desarrolló un método propio de investigación, se le empezó a considerar como disciplina científica.

El objeto de estudio de la Historia son las sociedades y sus transformaciones en el tiempo. La finalidad de la Historia es la interpretación de la totalidad de los hechos sucedidos en el pasado de la humanidad. El historiador realiza la interpretación ubicando  los sucesos, procesos y cambios históricos  en el tiempo y el espacio, así como analizando sus causas y consecuencias para encontrar la relación del pasado con el presente con el fin de poder hacer una posible proyección futura.

En la actualidad, la importancia de la historia no radica únicamente en los acontecimientos mismos, sino en su explicación y los cambios que se dan en y por ellos. La narración de los hechos, las relaciones con su ambiente, así como su comprensión e interpretación  forman parte de cualquier estudio histórico integral. En este sentido, la historia es un conjunto de sucesos ya verificados para explicar el presente, descubrir sucesos nuevos y participar en lo que ocurrirá en el futuro. Es decir, se puede afirmar que la historia es una ciencia dinámica, ya que no está limitada por el tiempo.

Al reflexionar respecto a la importancia de la historia se debe recordar que el estudio histórico sirve, ante todo, para saber de dónde se proviene, cómo se llegó a ser de dicha forma y, en consecuencia, hacia dónde habría que dirigirse.

La historia permite comprender, por sus orígenes, los vínculos que prestan cohesión a una comunidad humana y permitirle al individuo asumir una actitud consciente ante ellos. Esa actitud puede ser positiva: la historia sirve, entonces, a la cohesión de la comunidad es un pensamiento integrador; pero puede también ser crítico. Porque, al igual que la filosofía, la historia puede expresar un pensamiento de reiteración y consolidación de los lazos sociales o, a la inversa, un pensamiento de ruptura y de cambio.

El estudio de la Historia no se enmarca sólo en las características políticas y económicas de las sociedades, se apoyan ampliamente en otras ciencias y disciplinas, o que  le proporciona un carácter crítico que la convierte en una herramienta básica para el análisis y la reflexión del proceso evolutivo del pensamiento humano.

En conclusión, lo histórico debe tratarse analíticamente y de forma crítica, considerando los factores políticos, económicos, sociales y culturales de las comunidades humanas a través del tiempo, así como utilizando los métodos de investigación de otras ciencias y de las ciencias sociales, ya que la historia es una disciplina científica que requiere apoyarse en otras muermosas ciencias para dar como resultado una interpretación y reflexión integrales. “La historia es también una lucha contra el olvido, forma extrema de la muerte”.

Periodización histórica tradicional

Prehistoria Aparición del hombre (3 millones y medio de años aproximadamente)

Edad Antigua. Inicia con la invención de la escritura (3500 a.C., aproximadamente) y termina con la caída del Imperio Romano de Occidente, en 476 a.C.
Edad Media. Comienza con el declive de Roma de el siglo V, y finaliza tras el derrumbe del Imperio Romano de Oriente (Constantinopla) en 1453 d.C.
Edad Moderna. Empieza con la derrota de Constantinopla frente al Imperio Otomano en el siglo XV y culmina con el estallido de la Revolución Francesa en 1789.
Edad Contemporánea. Aborda los sucesos históricos desde la Revolución Francesa hasta la actualidad.