La familia como prestadores de dinero, propiedades u otros activos en un negocio

En la mayoría de los casos el promotor del negocio no cuenta con los recursos suficientes para iniciar el negocio y si existe la posibilidad de que los familiares aporten esos recursos, lo aconsejable es recurrir a ellos para solicitárselos.

Si se decide solicitar el apoyo económico o material de la familia es aconsejable no dejar todo a la palabra.

Lo conveniente es documentar todo, poniendo límites, y estableciendo las formas en que los préstamos deberán ser pagados, asentando las sanciones correspondientes en casos de falla, para de esta manera garantizar el pago de los préstamos.

Al iniciar algún negocio, la mayoría de la veces, se convierte en un “barril sin fondo” en cuanto a la utilización de los recursos, ya que nunca son suficientes, por lo que es necesario recurrir a los préstamos y para evitar que se puedan dar malos entendidos es conveniente dejar los asuntos de préstamos lo suficientemente claros.

Fuente: Apuntes de Administración de Pymes de la FCA de la UNAM