Modelo de cambio planeado de Faria mello

En su libro Desarrollo organizacional, Faria Mello presenta un modelo de cambio planeado al cual divide, como en el caso de los otros tres modelos, en fases o etapas de consultoría.

Este proceso es cíclico.

La fase de entrada puede considerarse como algo que comienza a acontecer, por lo menos en parte, antes del establecimiento del contrato. Es una especie de subfase del contacto. Algunos autores la consideran como la fase entre el primer contacto y el contrato inicial. Por su parte, Faria Mello dice que: «contacto, contrato y entrada, se funden en una gran fase inicial con multicontactos, precontratos y subcontratos, con diferentes grados de profundidad o como extensión de la entrada

Ahora bien ¿qué es realmente el contacto? Se puede decir que se trata de una «exploración» entre consultor y cliente, lo cual permite iniciar un conocimiento mutuo y de reconocimiento preliminar de la situación por parte del consultor.

Modelo de cambio planeado de Faria mello
Modelo de cambio planeado de Faria mello

A continuación se presentan una tabla de comparación de los tres modelos clásicos de cambio, en donde se observan las características de cada uno.

Modelos clásicos de cambio
Modelos clásicos de cambio

Grinnell considera inclusive una fase anterior, que denomina «pre-trabajo», en la cual el consultor se prepara para el primer contacto con el cliente imaginando varias posibilidades sobre la finalidad del encuentro, lo que el cliente espera de él, etcétera.

La fase de contacto puede constar de una o más reuniones o encuentros entre consultor y cliente(s).

¿Y el contrato? Éste debe ser el resultado del acuerdo entre el agente de cambio y el sistema-cliente.

Se puede decir que ya establecido el contacto, una consecuencia lógica sería la celebración del contrato respectivo, en el cual se estipularan con claridad las expectativas tanto del sistema – cliente como del agente de cambio con respecto al programa. Es importante que estas expectativas consten por escrito para evitar malos entendidos o falsas expectativas con relación al alcance del programa. Por ello, surgen muchos conflictos entre consultor y sistema – cliente por no asentar por escrito lo que se espera sobre el programa.

Fuente: Apunte de Desarrollo Organizacional de la UNIDEG