Programación por lotes

En los procesos de configuración por lotes, se utilizan las mismas instalaciones para obtener múltiples productos.

Una vez obtenida la cantidad deseada de uno de los productos, las instalaciones se van a ajustar para procesar otro lote de otro producto diferente.

Para realizar la programación de este tipo de procesos, se debe tener en cuenta el tipo de lote de acuerdo a su tamaño, la variedad y homogeneidad de los productos, así como las características del proceso productivo.

De acuerdo a lo anterior, tenemos tres tipos de programación por lotes:

Job−shop. Se producen pequeños lotes de una gran variedad de productos, pero productos no estandarizados.

Los equipos son poco especializados o de uso general y se agrupan en talleres o centros de trabajo donde se realiza más de una actividad.

Los costos fijos son bajos, pero los variables son elevados por el uso de mano de obra especializada y bien capacitada.

Un ejemplo son los pedidos a medida o de talleres, los cuales se asignan a una persona calificada que será responsable de la mejor forma de obtenerlo.

Dependiendo el tipo de actividad, tal vez sea necesario recurrir a equipos funcionales o incluso subcontratar alguna tarea a terceras personas.

En batch, son lotes de mayor volumen y productos con bastantes versiones entre los cuales puede elegir el cliente, por lo que el proceso ya no es a la medida y hay un pequeño grado de estandarización.

Requiere de inversiones fuertes de capital para la automatización del proceso, la cual es en menor grado, permitiendo la flexibilidad del mismo.

La mano de obra bien capacitada es la clave para realizar cambios en las características y volumen de producción con facilidad.

Fuente: Apuntes de Operaciones de la FCA de la Unam