Queísmo

Un autor expresa: «El que es la piedra angular donde se rompen los puntos de las plumas mejor templadas. Al que mal empleado, a su abuso, a su sensibilidad excesiva y dolorosa, podemos llamarle queísmo».

Los principales causantes de este vicio son:

1. Uso indebido de «que» con el verbo “ser” cuando corresponde donde, como, cuando, por lo que, etcétera. (Como en esto influye el modo francés se llama «que galicado»)

Formas galicadas

Fue entonces «que» lo vi.

Es allí «que» ocurrió.

Será por eso «que» vino.

Es así «que» lo quiero hacer.

2. Abuso en el empleo de—que—:

Formas abusivas

Los que allí estaban, que conocían la situación, expresaron todo lo que sabían y lo que les parecía, para lograr que se solucionaran los problemas que habían surgido.

La casa que está en la esquina que da al este es la que le pareció que era la más indicada para lo que se proponía.

Le ruego que me indique qué es lo que debo hacer para que nuestros clientes conozcan lo que nos proponemos y acepten las condiciones que les brindamos.

3. Oscuridad de sentido por uso de «que”:

Formas oscuras

En ese banco, el gerente es N. Pérez, el primo de Z. González, que irá en la misión al exterior. (¿Quién irá?)

El título de ese libro, que es difícil de entender, … (¿Es difícil el título o el libro?)

Pusieron aclaraciones en las listas de empleados, que están incompletas. (¿Están incompletas las aclaraciones o las listas?)

Formas castizas

Fue entonces cuando lo vi. (Mejor: Entonces lo vi)

Es allí donde ocurrió. (Mejor: Allí ocurrió)

Será por eso por lo que vino. (Mejor: Quizá por eso vino)

Es así como lo quiero hacer. (Mejor: Así lo quiero hacer)

Formas sin «que»

Los presentes, conocedores de la situación, expresaron cuanto sabían y dieron su parecer para solucionar los problemas surgidos.

La casa situada en la esquina este le pareció la más indicada para su propósito.

Por favor deme instrucciones sobre lo adecuado para hacer conocer nuestros propósitos a los clientes y lograr su aceptación de las condiciones ofrecidas.

Formas aclaradas

En ese banco, el gerente es N. Pérez, el primo de Z. González. Éste (o aquél) irá en la misión al exterior.

El dificultoso título de ese libro… o el título de ese difícil libro. . .

Pusieron aclaraciones incompletas en las listas de empleados. O En las listas de empleados, incompletas, pusieron aclaraciones.

Fuente: Apunte de Comunicación escrita de la U de Londres.