Renacimiento de la química

El químico irlandés Robert Boyle (1627-1691) fue el primero en romper con la tradición alquimista, estableciendo el concepto moderno de elemento y adoptando la teoría atómica para explicar las transformaciones químicas. Al químico alemán Georg Ernst Stahl (1660-1734) se debe la teoría del flogisto para explicar la combustión, según la cual toda sustancia combustible posee un «principio inflamable» denominado flogisto.

En la combustión se desprende el flogisto acompañado de luz y de calor, quedando un residuo de «ceniza» o «cal» del cuerpo combustible.

Así, cuanto más inflamable era una sustancia tanto mayor era su contenido en flogisto.

La síntesis del agua fue conseguida en 1781 por el químico inglés Henry Cavendish (1731-1810).