Saturnino Herrán

Pintor mexicano nacido en Aguascalientes, Ags., el 9 de julio de 1887, hijo único del librero José Herrán y Josefa Guinchard. En 1901 los Herrán sé trasladaron a la capital de la república. La posición desahogada de la Familia dejo de ser al morir don José en 1903, cuando Saturnino aún no cumplía 16 años. Sobre él joven recayó la responsabilidad de mantener a la Familia y al mismo tiempo proseguir sus recién iniciados estudios en la Escuela Nacional de Bellas Artes, de la que era director el arquitecto Antonio Rivas Mercado.

Obtuvo una beca y Saturnino estudio tres años con el maestro catalán Antonio Fabrés hasta 1906 cuando éste renuncio por desacuerdos con la dirección del plantel.

Saturnino absorbió lo mejor de las enseñanzas del maestro, partidario del realismo pictórico, pero también sintió el deseo de experimentar propio de las vanguardias del siglo xx. Prueba de ello son sus pinturas Vendedor de plátanos, La ofrenda, El jarabe y el tríptico de dibujos preparatorios para lo que seria el mural Nuestros dioses, que causo escandalo cuando fue exhibidlo.

En 1912 conoció a Rosario Arellano, con quien contrajo matrimonio dos anos después, y a la que pinté varias veces con trajes de criolla y de mestiza. En 1915 nació su único hijo, José Francisco.

En 1918 un viejo mal gástrico se agravé y el pintor fue conducido al hospital, donde se le intervino quirúrgicamente el 2 de octubre. Falleció el día 8 del mismo mes.