Teorías cognoscitivas

Las teorías cognoscitivas están, fundamentalmente, basadas en la forma en que el individuo percibe o interpreta la situación que tiene ante sí.

Las teorías cognoscitivas incluyen el nivel de aspiración, relacionado con la fijación de una meta individual, la disonancia, encargada de los impulsos que persisten frecuentemente después que se ha hecho una elección, y las teorías de esperanza-valor, que tratan de la realización de una decisión cuando se toman en cuenta las probabilidades, el costo y los riesgos.

Las teorías cognitivas de la motivación acentúan como determinantes de la conducta motivada, la percepción de la fuerza de las necesidades psicológicas, las expectativas sobre la consecución de una meta y el grado en el que se valora un resultado correcto.

Como autores más representativos de esta teoría podríamos citar a Festinger, Tolman, Weiner, Heider. Entre las numerosas teorías que destacan el papel de los procesos cognoscitivos en la motivación, hay dos esencialmente señaladas:

– Las que hacen uso de esos constructores que se llaman expectativas;
– Las que postulan un modelo dinámico conocido como disonancia cognoscitiva.

Festinger describe ciertas clases de comprensiones desequilibradas como disonantes que suponen que el sujeto se encuentre en tensión para evitar dicha disonancia.

La clase de desacuerdo o falta de armonía que preocupa principalmente a Festinger es la consiguiente a tomar una decisión.

Bajo dichas circunstancias se origina frecuentemente una falta de armonía entre lo que uno hace y lo que uno cree, y por tanto existe una presión para cambiar ya sea la propia conducta o la creencia.

Psicológicamente hablando, un concepto disonante de otro no es sino aquel que resulta incompatible con otro, de tal forma que la aceptación de uno implica el rechazo del otro, o, más frecuente, le lleva a un intento de justificar una eventual reconciliación de ambos.

Por ejemplo, si un fumador habitual lee algo de la relación entre fumar y el cáncer de pulmón, la acción habitual y la nueva información son disonantes. Si se decide a seguir fumando, la disonancia se reducirá no creyendo la información sobre dicha relación.

Si se decide, en cambio, por dejar de fumar, defenderá firmemente la información sobre la vinculación entre fumar y el cáncer de pulmón.

Fuente: Apuntes de la materia Psicología del trabajo de la facultad de contaduría y administración, UNAM