Estado

Estado, denominación que reciben las entidades políticas soberanas sobre un determinado territorio, su conjunto de organizaciones de gobierno y, por extensión, su propio territorio. La característica distintiva del Estado moderno es la soberanía, reconocimiento efectivo, tanto dentro del propio Estado como por parte de los demás, de que su autoridad gubernativa es suprema.

El gobierno federal, sin embargo, está reconocido como soberano a escala internacional, por lo que las constituciones suelen delegar todos los derechos de actuación externa a la autoridad central.

En el plano nacional, el papel del Estado es proporcionar un marco de ley y orden en el que su población pueda vivir de manera segura, y administrar todos los aspectos que considere de su responsabilidad.

Todos los estados tienden así a tener ciertas instituciones (legislativas, ejecutivas, judiciales) para uso interno, además de fuerzas armadas para su seguridad externa, funciones que requieren un sistema destinado a recabar ingresos.

Los estados de la federación, en ejercicio de la soberanía que les otorga la Constitución Federal, se rigen por sus constituciones locales, en las cuales se establecen los derechos y obligaciones de los ciudadanos y algunas facultades y atribuciones de los poderes.

Los tres poderes se conforman de la siguiente manera:

Poder Ejecutivo: Lo ejerce un gobernador que es elegido cada 6 años, mediante el voto popular. Su función es dirigir la administración pública de su estado y hacer cumplir las leyes federales y estatales.
Poder Legislativo: Está integrado por un grupo de personas que forman la Cámara de Diputados o Legislatura local, cuya principal función es iniciar, discutir y aprobar las leyes de su jurisdicción (territorio en que ejerce la autoridad).
Poder Judicial: Tiene su máxima representación en un Tribunal Superior de Justicia, formado por magistrados; su tarea principal es la administración de justicia.