Evolución histórica de la mercadotecnia

Una simplificación de la mercadotecnia desde la revolución industrial a partir de la década de 1860 hasta la de 1950, hizo énfasis en dos actividades: la producción masiva y la eficiencia en la entrega del producto. Los héroes del siglo XIX, fueron financieros y constructores de imperios que transcendieron en el tiempo, como lo fueron Morgan, Rockefeller y Carnegie, quienes construyeron grandes fábricas para hacer nuevos productos y redes de transporte para entregarlos.

En el siglo XIX, genios como Ford y Watson, que abrieron las puertas a la producción en masa con nueva tecnología, continuaron con su obra. Luego con la Gran Depresión vino una época de privaciones y dificultades muy significativas, durante la cual la mercadotecnia casi no tenía sentido. La Segunda Guerra Mundial convirtió a las fábricas de EEUU en productores de la industria bélica: de tanques y Jeeps, artillería y municiones y aviones de caza y bombarderos.

Cuando terminó la guerra, se produjo una gran demanda de productos, concluyendo cuatro años de racionamiento mediante cupones y sacrificios. La mercadotecnia no se había formalizado como concepto, y ante la creciente demanda de bienes las actividades de ventas no eran tan importantes. Lo importante era llevar los productos de ventas no eran tan importantes. Lo importante era llevar los productos a los consumidores, y convertir la fabricación con eficiencia en la función más importante de esa década.

A finales de la década de 1950, el auge inicial de la demanda fue satisfecho y la economía empezó a cambiar, sin embargo, las compañías orientadas a la producción intentaban mantener su rentabilidad, bien sea tomando dinero del proceso de fabricación o vendiendo más productos.

Se inventó la mercadotecnia a nivel masivo para vender productos estandarizados que se fabricaban en serie a una masa de consumidores igualmente estandarizada más no diferenciada. Durante la década de 1960, se introdujo el término mercadotecnia. Esto sugería que todo tenía las necesidades y los deseos de los consumidores como punto de partida, pero los negocios continuaron funcionando igual que antes, con muy pocas excepciones.

Muchos historiadores coinciden en que no fue sino hasta transcurrida gran parte de la década de 1980 que el concepto de mercadotecnia fue de verdad adoptado por las empresas.

En la actualidad los consumidores están mejor educados, están más conscientes de lo que ocurre a su alrededor y tienen tanto el dinero como el poder de la opinión. Ahora estamos dentro de una sociedad global, con nuevos competidores y más y mejores opciones.

Los productos para cualquier tipo de público, si bien resultaban bastante rentables, ya no gozan de la misma aceptación entre los consumidores. En la actualidad los mercadólogos están concientes de que si pretenden competir en forma eficaz, están obligados a centrarse en los problemas de los consumidores y a tratar de desarrollar productos que los resuelvan. Realizar bien esta actividad promete obtener, en última instancia, una ventaja competitiva.

El concepto de mercadotecnia establece: primero, hay que determinar qué necesita y desea el consumidor y luego desarrollar, fabricar, comercializar y dar servicio a esos bienes y servicios que satisfacen necesidades particulares.

Fuente: Apuntes de Mercadotecnia y Publicidad de la Universidad de Londres