Paso para explicar dichos principios de la producción del conocimiento teórico-científico

Los pasos para explicar dichos principios son:

1. La realidad es una y común. Lo que es real forma una unidad. No hay muchas realidades. No hay en el conjunto de lo real sino la totalidad de las cosas.

La realidad, como totalidad de lo que es, es común a todos. Lo que está ahí, frente a nosotros, es lo mismo para mí que para él y para ella, para ellos, y para ellas.

Lo que en todo caso puede ser diferente, es la opinión que nos formamos de lo mismo, de la misma realidad común. Si no habláramos y pensáramos lo mismo, no podríamos hablar ni pensar, pues tanto el habla como el pensamiento requieren de una referencia común a lo mismo.

2. La razón es una y común. No hay varias razones, sino una y la misma para todos, en todos. La razón, en la multiplicidad y diversidad de sus voces, forma una unidad.

Si la razón no fuese una, y hubiera multiplicidad y diversidad de razones, el conocimiento no podría ser nunca verdadero y únicamente contaríamos con una multiplicidad y diversidad de opiniones o versiones del mundo o mundos generadas por razones incomunicables entre sí.

Nadie tiene su razón particular. Los hombres tenemos la misma razón. Por eso Descartes decía al comienzo de su Discurso sobre el método (Porrúa, México, 1971) que la razón es lo mejor repartido entre los hombres. Nos entendemos porque usamos la misma razón.

3. La realidad es racional. Nada hay en lo real que sea irracional. Nada es ni sucede sin razón. Nada sucede porque sí, todo tiene una razón para ser lo que es y no ser lo que no es. Cuando el hombre descubre esta constitución ordenada de lo real que denominamos racionalidad, se da cuenta de que es posible una faena como la del conocimiento que se proponga precisamente buscar y encontrar las razones por las cuales sucede y es, lo que sucede y es.

4. La realidad es temporal. Todo cambia. Hay algo en el mundo que hace posible el conocimiento: la temporalidad de la realidad. Si todo permaneciera en su ser, no habría forma de reconocerlo. Toda cosa es en el tiempo. En un mundo intemporal, no habría nada que conocer, el conocimiento sería imposible.

Una vez planteado el asunto de los principios de la ciencia, damos paso a pensar el problema del conocimiento científico y su finalidad. Sin embargo, para ellos es necesario detenernos un instante y recapitular una serie de ideas que se han desarrollado a lo largo de los primeros temas.

Anteriormente se ha mencionado, que el conocimiento se define como la capacidad de dar razón de (decir) lo que son las cosas, así mismo se mencionó que esta actividad se relaciona con la investigación en el sentido de que ambas acciones se refieren a la búsqueda e indagación.

Por este motivo señalamos que mediante el conocimiento el hombre busca (investiga) algo de las cosas, también se observó que el conocimiento de las cosas tienen que ver directamente con una intención, pues toda pregunta tiene una intención bien determinada, se pregunta para algo. Ahora bien, ¿cuál es la finalidad del conocimiento científico?

Resolver esta cuestión implica en principio explicar lo que es la ciencia. Pues bien, como señala el filósofo Juan Manuel Silva Camarena, la ciencia es un asunto de palabras desinteresadas.

Mejor dicho: el conocimiento científico es una manera distinta de hablar que consiste en decir, lo que las cosas son, independientemente de lo que quisiéramos que fueran (en función de otros intereses). Ésta es la gran diferencia.

Se trata de un decir rigurosamente vigilado: la vigilancia estricta de sus razones es lo fundamental en la ciencia, porque de ese modo se logra evitar, por un lado, las arbitrariedades del sentido común, y por otro, las creencias y prejuicios ligados a los intereses humanos.

La ciencia es explicación de hechos. La investigación científica no se contenta con decir lo que pasa, pues su tarea es la de decir por qué razón pasa lo que pasa.

También el sentido común ofrece explicaciones de lo que sucede, pero sus explicaciones no están fundadas en razones suficientes de las cosas mismas.

Como se ha señalado la ciencia busca (investiga) explicar lo que son las cosas y su origen con base en las cosas mismas; en este punto se encuentra la diferencia con el conocimiento práctico, pues la finalidad de éste último es buscar (investiga) la utilidad de las cosas, dándose la posibilidad de que una misma cosa sea diferentes cosas para distintos sujetos, ya que lo que es la cosa depende de la necesidad de cada uno de ellos.

Por lo tanto, se puede observar que la ciencia es. Una forma particular de preguntar por las cosas (qué es y por qué razón es lo que es).

Una forma de investigar, ya que busca saber lo que son las cosas y sus causas de origen. Una forma de relacionarse con las cosas, ya que lo que se dice de ellas se fundamenta en las cosas mismas, alejándose de intereses particulares y de grupos, de las necesidades y de las opiniones personales.

De esta forma, se establece que la intención de la investigación científica es buscar lo que son las cosas y sus causas de origen, con base en las cosas mismas. Ahora bien, este tipo de investigación sostiene su labor a través de dos dispositivos esenciales que son: el método científico y el ethos de la ciencia.

Fuente: Apuntes de la materia Principios y Técnicas de investigación de la FCA UNAM