Reproducción vegetativa

La perpetuación de un animal discurre por dos fases: una de aparición de la unidad reproductora y otra de crecimiento y desarrollo de esta hasta formar un individuo adulto. La unidad reproductora se produce por vía sexual o vegetativa y sexual. Dentro de estos dos tipos se distinguen dos estrategias adoptadas por los seres vivos para perpetuarse. La primera es la generación de gran número de individuos y es típica de animales pequeños con vida breve.

Mientras que la segunda es adoptada por grupos más longevos y complejos y es la génesis de una descendencia escasa.

Reproducción vegetativa

Es la forma de multiplicación más primitiva, característica de animales de organización sencilla y sésiles. La unidad reproductora es una porción grande del cuerpo, no especializada en esta función, y puede ser cualquier y parte de aquél.

Su ventaja es que no requiere de la participación de dos individuos, pero si de condiciones ambientales  adecuadas. Hay varios tipos de reproducción vegetativa: la bipartición es una división, por lo general transversal, del cuerpo del animal en dos partes, cada una origina un nuevo individuo.

En los protozoos se producen varias divisiones seguidas y los individuos permanecen unidos en de una colonia. En  los metazoos, la bipartición se realiza en células de los tejidos para sustituir las muertas y en algunos, como las  estrellas de mar, para recomponer el animal completo a partir de una porción suya (la estrella lo hace de un brazo).

Este proceso recibe el nombre de regeneración y tiene lugar en algunos  vertebrados (Ej. las salamandras). La regeneración se considera como un caso de fragmentación, en que el individuo se desprende de varias partes de su cuerpo, cada cual generara un nuevo animal completo.

Muchos animales sésiles, como esponjas o celentéreos, producen  células corporales que se desarrollan hasta formar un  nuevo individuo, que se desprende o queda unido a el  formando una colonia. Estas  células reciben el nombre de yemas y el proceso se denomina gemación.

Otra forma de reproducción asexual es la  división múltiple, donde el núcleo de una célula experimenta varias divisiones configurando una célula plurinucleada. Cada uno de estos núcleos se rodea de una porción de citoplasma y una membrana y se separa del resto, por lo cual aparecen gran número de individuos.