Tipos de señales

Existen dos tipos de señales electrónicas, las analógicas y las digitales. En el pasado, el procesamiento de las señales se realizaba siempre en forma analógica. Éste seria, por ejemplo, el método seguido en la transmisión de señales acústicas empleado en telefonía. Las señales  acústicas generadas por la voz humana se transforman en señales analógicas, con sus correspondientes frecuencias y tensiones (por ejemplo, mediante micrófono).

Convertidas en señales analógicas, se transmiten a través del hilo telefónico y llegan a un sistema que las descodifica, es decir, transforma la señal analógica nuevamente en sonido audible (función que se verifica en el auricular).

El otro método sería la n transformación de la voz captada por el micrófono en una señal su digital. Para ello, los niveles de presión sonora correspondientes al sonido se determinan a intervalos si muy pequeños, registrándose la serie de valores correspondientes (expresados en sistema binario).

Con lo cual, si bien no se dispone de un registro continuo de la señal, sí se obtiene una serie de valores discretos que permiten reconstruirla con gran fidelidad, dependiendo de los intervalos de exploración empleados. La información obtenida de este modo es la que se utiliza para la transmisión a través de los diversos Canales.

La transmisión, elaboración y almacenamiento de dicha información digital es mucho más ventajosa y fácil desde el punto de vista electrónico ya que corresponde únicamente (cuando los números se expresan en el sistema binario) a los valores 1 y 0 ya mencionados, para los cuales, como hemos visto, las operaciones son muy sencillas tanto desde el punto de vista matemático como desde el de su realización por medios mecánicos o electrónicos.

Una vez transmitida la información, el receptor al que llega mezclada con las señales de sincronización necesaria, la descodifica nuevamente y reconstruye la señal continua registrada en origen. Este tipo de tratamiento de la información ofrece, además, múltiples ventajas en cuanto a los procesos de reconstrucción, superposición y otro tipo de manipulaciones que han permitido desarrollar toda una serie de técnicas «digitales» para el tratamiento de las señales.