Academia

Academia, sociedad artística, literaria o científica que cuenta con autoridad pública y cuya finalidad es proteger y fomentar los distintos campos del saber. Originaria de la antigua Grecia, la academia era un jardín público a las afueras de Atenas, cuyo propietario era Academo, habitante del Ática, que donó estos jardines al pueblo ateniense. A la vuelta de su primer viaje a Sicilia (387), Platón fundó una escuela en Atenas.

La escuela estaba ubicaba, camino a Eulisis, en los jardines consagrados al héroe Academos, por lo que recibió el nombre de «Academia». Como toda escuela ateniense, tenía como fin primario el culto de los dioses, las Musas y Apolo. Pero, además, la Academia era un centro de estudio y formación en temas filosóficos y científicos (matemática, música, astronomía, física). En la entrada de la escuela había una leyenda: “No ingrese aquí si no es geómetra”.

En la Academia, la formación se impartía mediante lecciones dadas por el propio Platón, sus discípulos y los visitantes ilustres que llegaban a la ciudad. También el diálogo servía de método de enseñanza.

Al morir Platón, su sobrino Espeusipo quedó a cargo de la escuela (347-338). Las discrepancias entre los miembros de la Academia se ponen de manifiesto en el hecho de que el propio sucesor de Platón rechazaba la Teoría de las Ideas. A Espeusipo lo siguieron en el cargo Jenócrates de Calcedonia (338-324), quien fue el primero en dividir la filosofía en física, ética y lógica; Polemón de Atenas (314-269) y Crates de Atenas (269-264).

La Academia fue cerrada, al igual que el Liceo aristotélico, en el año 529, cuando el emperador Justiniano de Bizancio ordenó la clausura de todas las escuelas filosóficas de la ciudad.