Aguas litorales
La marisma seca: siendo la zona más terrestre, está sometida en regiones templadas al cambio de estaciones. En época de lluvias florecen las especies vegetales superiores, y el encharcamiento humedece la tierra para que crezca abundante pasto. Es frecuente la invasión de poblaciones del interior, como los venados, conejos y los jabalíes, que encuentran alimento abundante.
También tos carnívoros como el lince y el zorro, asechan a las abundantes aves migratorias. Especies orníticas típicas, son las agachadizas, chorlitejos, cigüéñelas, avocetas, avefrías y lavanderas.
El carrizal
La maraña de carrizos y eneas con terreno encharcado, hacen un lugar idóneo para que las aves hagan sus nidos a salvo de depredadores.
En charcas estancadas, los mosquitos depositan sus huevos y, cuando eclosionan, inmensas bandadas de éstos se elevan por el carrizal, contribuyendo a la dieta de pequeñas aves insectívoras. Los carriceros, calamones, bigotudos, escribanos y el aguilucho lagunero habitan esta franja.
Las aguas libres
De la orilla de pequeñas playas hasta aguas más profundas en las que bucean los patos, los invertebrados acuáticos del fondo, los animales y vegetales del plancton y diversas especies de peces pequeños atraen a fochas, pollas de agua, porrones; ánades, somormujos, rascones, espátulas, garcetas y flamencos. En esta franja no faltan las gaviotas y charranes, que encuentran un sustento seguro entre tanta biomasa.
