Alejandro Magno
Alejandro fue uno de los mayores conquistadores de la historia, destacó por su brillantez táctica y por la velocidad con la que cruzó grandes extensiones de terreno. Aunque fue valiente y generoso, supo ser cruel y despiadado cuando la situación política lo requería, aunque cometió algunos actos de los que luego se arrepintió, caso del asesinato de su amigo Clito en un momento de embriaguez.
Como político y dirigente tuvo planes grandiosos; según muchos historiadores abrigó el proyecto de unificar Oriente y Occidente en un imperio mundial, una nueva e ilustrada hermandad mundial de todos los hombres.
Alejandro tenía veinte años cuando ascendió al trono, fue educado bajo las normas griegas al lado del filósofo Aristóteles. Poseía gran talento militar, incansable resistencia, una inquebrantable voluntad, una visión clara de la estrategia, creía en la rapidez de los movimientos bélicos y tenía confianza en el triunfo.
Alejandro Magno concedió algunos derechos y poderes a los pueblos: les permitió que mantuvieran sus instituciones nacionales, sus religiones, sus costumbres sociales y estableció el comercio internacional. lnstauró un sistema monetario uniforme.
La muerte de Alejandro Magno ocasionó una violenta lucha por el poder entre sus colaboradores más cercanos. El resultado de este enfrentamiento fue la fragmentación del imperio: la India y Persia se independizaron, mientras que Macedonia, Siria y Egipto, formaron tres reinos.