Cambios en el aparato reproductor de la mujer
1. Útero: crecimiento debido fundamentalmente a:
– Feto en crecimiento que conlleva un aumento del tamaño.
– Estrógenos. Las fibras uterinas se hiperplasian e hipertrofian (formación de tejido nuevo y aumento del número de células).
Al final de la gestación el útero puede pesar aproximadamente un kilogramo y su capacidad aumenta hasta 1000 veces (desde 70 g. que pesa en una mujer adulta no gestante).
2. Cérvix: se va adaptando al parto y al puerperio. Gana en vascularización, también en secreción de mucosidad cervical.
Además se va ablandando y suavizando. Poco a poco con las contracciones (no las de Braxton Hicks) se va a ir acortando y borrando preparándose para la dilatación.
3. Ovarios: mantienen cierta actividad hasta que la placenta se encarga de la secreción hormonal, o sea, hasta que la placenta adquiere la función completa (aproximadamente 10ª semana).
El ovario segrega estrógenos y progesterona hasta que lo hace la placenta de forma suficiente.
4. Vagina: se prepara para en el momento del parto poder distenderse sin dificultad.
Se torna más hiperémica (se produce vasodilatación) y la mucosa se prepara para ampliarse.
5. Mamas: desde la 8ª semana experimentan cambios. Los estrógenos perfilan el sistema conductual mamario.
La progesterona también prepara las glándulas mamarias. Secreción de calostros desde la 10ª semana de gestación hasta tercer día después del parto.
Después se instaura la secreción láctea transitoria y finalmente la definitiva.
Fuente: Apuntes y notas de enfermería materno infantil del Conalep