Cobro por hora
El tiempo es uno de los componentes más importantes del costo de un proyecto de diseño. Aprender a medirlo y darle un valor es la herramienta que nos permitirá calcular un presupuesto de forma acertada.
Características
– Alcance de las responsabilidades
La responsabilidad de ambas partes termina cuando ambas partes lo deciden, sin importar en qué punto se encuentra el o los proyectos. Normalmente se finalizan los proyectos en tránsito.
– Expectativas (qué se paga y qué se recibe)
En este caso sabremos de antemano el costo por hora de trabajo, pero no sabremos cuánto nos vamos a tardar en el desarrollo de un proyecto. Aunque sabremos lo que vamos a obtener. La velocidad del diseñador es importante.
– Cómo medir resultados
Presentaremos reporte de los avances de nuestro trabajo con cierta periodicidad al cliente. Tanto para someter el mismo a su consideración como para justificarle el tiempo invertido.
– Implicaciones directas
Elaboraremos un solo presupuesto general, que emplearemos para cualquier proyecto. Asimismo y muy recomendablemente, elaboraremos un contrato de prestación de servicios.
El cálculo del costo por hora es conveniente cuando:
– En cualquier caso, siempre que sea interesante para ambas partes.
– El cliente o el diseñador no quieran estar ligados por un proyecto, por alguna razón.
– Al diseñador le sea fácil comprometerse en términos de cantidad de trabajo en función del tiempo y al cliente le sea cómodo ir pagando los proyectos en función de los avances de los mismos.
– No sea tan importante la fecha de finalización del proyecto y el diseñador pueda avanzar en base a su disponibilidad de tiempo. Asimismo, tanto el cliente como el diseñador deberán contar con el tiempo necesario para reunirse periódicamente y revisar los avances del trabajo.
– El proyecto no está definido y se irá implementando a medida que vaya avanzando. En este caso seria muy tedioso hacer presupuestos para cada una de las fases que se vayan definiendo y sería difícil de administrar.
– El proyecto tenga planeado un desarrollo muy largo o se desarrollará de manera inconstante o con muchos cambios en el camino.
– El proyecto sea de índole permanente y el diseñador tenga que revisarlo y actualizarlo con una periodicidad no definida.
– El cliente necesite diferentes servicios de diseño de índole diversa de manera constante o simultánea. mismos que no ameritan una iguala.
– Otros.
Fuente: Materia de Presupuestos y costos en el diseño gráfico de la Universidad de Londres