Comentarios sobre el arte y la gráfica
Tendemos a suponer que las personas que entran en la vida de las artes deben poseer sensibilidad creativa. Queda claro, entonces, que el arte contemporáneo ejerce una influencia directa en tales personas tan pronto como se ocupan de la adaptación pictórica de una idea. He llegado a esta comprensión de las cosas al cabo de treinta años de actividad en el campo del arte aplicado.
Habiendo actuado también en el diseño gráfico, que es otra de las artes aplicadas, siempre mantuve a la vista el aspecto práctico, ya que éste es un componente de toda forma de publicidad. Siempre me ha preocupado la «filosofía» de un mensaje que debe ser comunicado de manera general.
Si nos atenemos a la definición de Hegel de la filosofía como «la contemplación intelectual del autodespliegue de la razón,» mi actitud como artista gráfico primero ha sido analítica, luego lógica y finalmente crítica, especulativa y estética. Mi punto de partida es un sistema, dentro del cual vislumbro una verdad y luego la represento pictóricamente; ya que en el análisis final, a toda serie de pensamientos comerciales corresponde su propia justificación y una adecuada expresión pictórica.
La libertad total en la creación artística me parece la base de todo arte contemporáneo: pero la libertad es un concepto que muy frecuentemente no coincide con los requerimientos prácticos de la publicidad y comercialización actuales.
La gráfica aplicada, por otro lado, es un servicio, y sería pretencioso creer que a través del arte comercial pueda hacerse consciente a un público más amplio de la problemática del arte libre.
Esto lleva a suponer que la expresión de la libertad, que subyace detrás de toda genuina obra de arte, urge de la reflexión sobre el hombre y su entorno. Si se me permite expresarlo en términos.
La antropología procede de la percepción del hombre como ser biológico, pero al mismo tiempo, aprehende el lado psíquico de su naturaleza, que está íntimamente relacionado con su entorno sociocultural. Resumiendo: sólo el artista realmente dotado y que posee esta visión «antropológica» puede influenciar a un público más amplio sobre el mensaje publicitario y más allá de éste, ateniéndose a la sustancia de su personal sistema de valores. Es esto, en el análisis final, lo que constituye el arte genuino.
Fuente: Teoría conceptual del diseño de la U de Londres