Comparación de las técnicas de crecimiento constante y el MAPAC
El empleo del MAPAC, en relación con el modelo de valuación de crecimiento constante, difiere en que considera de manera directa el riesgo de la empresa, como se refleja por el coeficiente beta, para determinar el rendimiento requerido o costo de capital de las acciones comunes.
El modelo de crecimiento constante no considera el riesgo; utiliza el valor de mercado, Po, como un reflejo de la preferencia esperada de riesgo-rendimiento de los inversionistas en el mercado.
Aunque en teoría existe igualdad en cuanto a encontrar les, entre las técnicas del modelo de valuación de crecimiento constante y del MAPAC, en un sentido práctico resultaría difícil demostrar dicha igualdad, debido a los problemas de medición relacionados con el crecimiento, a beta, a la tasa libre de riesgo (qué vencimiento de valor gubernamental emplear), y al rendimiento de mercado.
El empleo del modelo de crecimiento constante suele preferirse debido a la mayor disponibilidad de los datos requeridos por el mismo.
Otra diferencia estriba en el hecho de que, cuando se utiliza el modelo de valuación de crecimiento constante para obtener el costo de capital de las acciones comunes, éste puede someterse con facilidad a un ajuste por el costo de emisión, a fin de encontrar el costo de las nuevas acciones comunes; por su parte, el MAPAC no provee un mecanismo sencillo de ajuste.
La dificultad para ajustar el costo de capital de las acciones comunes, calculado por medio del MAPAC, surge del hecho de que, en su forma común, el modelo no incluye el precio de mercado, Po, una variable necesaria para llevar a cabo tal ajuste.
Aunque el MAPAC tiene un fundamento teórico más sólido, el atractivo referente al cálculo del modelo de valuación de crecimiento constante justifica el uso del mismo, a lo largo de esta obra, en la medición de los costos de las acciones comunes.
Fuente: Apuntes de Administración financiera de la UNIDEG