Derecho positivo mexicano
La administración de justicia tiene como finalidad garantizar el cumplimiento de las leyes, aplicando las sanciones correspondientes a quienes las violan. Se integra dentro del marco del derecho positivo, es decir, el conjunto de preceptos legales que tiene por objeto que la vida social se desarrolle en armonía.
Dentro del derecho positivo podemos distinguir:
El derecho público: Regula las relaciones entre el Estado y los individuos, o las que se establecen entre dos o más Estados.
Se divide en:
– Constitucional: Se relaciona con las leyes fundamentales del país, las que determinan las relaciones entre el Estado y los particulares.
– Administrativo: Tiene por objeto la administración pública del Estado.
– Procesal: Se divide en procesal civil y procesal penal; tiene por fin la aplicación de la ley en casos específicos.
– Penal: Determina los delitos y las sanciones impuestas por infracciones a las leyes; considera medidas para prevenir la delincuencia.
– Agrario: Define la propiedad, posesión, tenencia y explotación de las tierras de cultivo.
– Laboral: Rige las relaciones entre trabajadores y patrones.
– Internacional público: Considera las normas y reglas que rigen las relaciones entre países.
El derecho privado
Se divide en:
– Civil: Determina la situación jurídica y el estado civil de las personas.
– Mercantil: Rige los actos del comercio y los comerciantes.
– Internacional Privado: Se relaciona con problemas de personas extranjeras.
El derecho civil
El derecho civil se basa en el Código Civil, es decir, el conjunto de leyes y principios de derecho que norma las relaciones entre las personas, y de las personas con aspectos como:
– Responsabilidad de deudores con acreedores.
– Propiedad, posesión y usufructo (derecho a usar una cosa ajena) de bienes.
Declaración ante el Registro Civil de: nacimientos, adopciones, tutelas, emancipaciones, matrimonios, divorcios, defunciones, ausencias o presunción de muerte y capacidad legal de las personas.
– Los padres de un niño deben declarar su nacimiento ante el Registro Civil.
Para efectos legales, sólo son miembros de la sociedad, sujetos a deberes y derechos, las personas que han sido presentadas ante el Registro Civil y que pueden acreditar su personalidad mediante el documento que el juez les entrega (el acta de nacimiento).
Este documento es requisito indispensable para la tramitación de diversos asuntos que tienen que ver con su educación, su salud, su desarrollo profesional y muchos aspectos más. Carecer de este documento equivale a no existir para la sociedad.
Ley concede un periodo de seis meses, contados a partir de la fecha de nacimiento, para que los padres presenten al recién nacido ante el juez del Registro Civil que corresponda a su domicilio, con el fin de que levante el acta de nacimiento del pequeño. Deben ir a la oficina acompañados por dos testigos que cuenten con identificación oficial.