Diseño de sistemas
El diseño de sistemas se define como el proceso de aplicar ciertas técnicas y principios con el propósito de definir un dispositivo, un proceso o un sistema, con suficientes detalles como para permitir su interpretación y realización física.
Uno de los objetivos del diseño de sistemas de información es proporcionar la especificación del bosquejo del sistema, esto es, las “características” del sistema que serán trasladadas en software para su uso por la organización. Estas especificaciones, denominadas “diseño lógico” del sistema, incluyen detalles sobre salidas, entradas, archivos, interacciones con bases de datos, controles y procedimientos. La “construcción física”, que es la etapa que sigue al diseño lógico (según Senn), produce el software, los archivos y un sistema que trabaja.
En otras palabras, cuando los analistas especifican las “características” de un sistema diseñan flujos de datos, almacenes de datos, procesos, procedimientos y controles; pero también describen los papeles que deben asignarse a todas las personas que tienen que ver con el nuevo sistema, como los usuarios, operadores de computadora y el personal de apoyo. Con frecuencia, los procedimientos explican el papel de los individuos. A continuación explicaremos un poco más a detalle el diseño lógico:
Diseño de la Salida. En este caso “salida” se refiere a los resultados e informaciones generadas por el sistema. Para la mayoría de los usuarios la salida es la única razón para el desarrollo de un sistema y la base de evaluación de su utilidad. Y aunque muchas veces los usuarios no operan el sistema de información y tampoco ingresan datos en él, sí utilizan la salida generada por el sistema.
Al diseñar la salida, el analista debe realizar lo siguiente:
– determinar qué información presentar;
– decidir si la información será presentada en forma visual, verbal o impresa y seleccionar el medio de salida;
– disponer la presentación de la información en un formato aceptable; – y, decidir cómo distribuir la salida entre los posibles destinatarios (la “distribución” se refiere a la disposición de la información en una pantalla o documento impreso).
Diseño de la entrada. El analista debe decidir sobre qué datos ingresan al sistema, qué medios utilizar, la forma en que se deben disponer o codificar los datos, el diálogo que servirá de guía a los usuarios para dar entrada a los datos.
También debe asignar una validación de datos y transacciones para detectar errores, así como los métodos para llevar a cabo esta validación y los pasos a seguir cuando se presente algún error.
Las decisiones de diseño para el manejo de las entradas especifican la forma en que los datos serán aceptados por la computadora para su procesamiento y también especifican los medios por los que los usuarios finales y los operadores darán instrucciones al sistema sobre las acciones que debe emprender.
También forman parte del diseño de entradas: la disposición de mensajes y comentarios en las “conversaciones en línea”; así como la ubicación de los datos, encabezados y títulos sobre las pantallas o documentos fuentes.
Los sistemas en línea incluyen un diálogo o conversación entre el usuario y el sistema. Por medio del diálogo, el usuario solicita servicios al sistema y le indica cuándo realizar cierta función. A menudo la naturaleza de la conversación en línea hace la diferencia entre un diseño exitoso y otro inaceptable.15
Diseño de archivos. El diseño de archivos incluye decisiones con respecto a la naturaleza y contenido del propio archivo. Durante el diseño de archivos se debe decidir qué datos deberán incluirse en el formato de los registros contenidos en el archivo; también la longitud de cada registro (con base en las características de los datos que contiene); así como la secuencia a disposición de los registros dentro del archivo (la estructura de almacenamiento que puede ser secuencial, indexada o relativa).
Es posible que el nuevo sistema no requiera el diseño de todos los archivos utilizados por la aplicación, esto sucede en caso de que existan “archivos maestros” que ya estén en uso por otras aplicaciones. En este caso puede ser que la nueva aplicación únicamente haga referencia al archivo maestro y los detalles
del archivo queden incluidos en las especificaciones del diseño de la aplicación. Esto evita que el archivo vuelva a diseñarse.
Diseño de Interacciones con la Base de Datos. La mayoría de los sistemas de información, ya sea implantado en sistemas de cómputo grande o pequeño, interactúan con las bases de datos que abarcan varias aplicaciones. Por la importancia de las bases de datos en los sistemas, su diseño es establecido y vigilado por un administrador de base de datos (persona responsable del desarrollo y mantenimiento de la base de datos), en este caso el diseñador no construye la base de datos sino que consulta a su administrador para ponerse de acuerdo en el uso de ésta en el sistema.
Diseño de controles. El analista debe anticiparse a los errores que pudieran cometerse al ingresar los datos en el sistema o al solicitar la ejecución de ciertas funciones. Puede ser que algunos errores no tengan graves consecuencias, pero puede ser que otros ocasionen el borrado de datos o el uso inapropiado del sistema. Aunque exista la más mínima probabilidad de cometer un error serio, un buen diseño de sistema de información ofrecerá los medios para detectar y manejar el error.
Se pueden diseñar controles de entrada que proporcionen medios para que sólo los usuarios autorizados tengan acceso al sistema; medios para garantizar que las transacciones sean aceptables; medios para validar los datos (para comprobar su exactitud) y, medios para determinar si se han omitido datos que sean necesarios.
Diseño de procedimientos. Los procedimientos especifican qué tareas deben efectuarse al utilizar el sistema y quiénes son los responsables de llevarlas a cabo. Algunos ejemplos de procedimientos son:
– procedimientos para entrada de datos (métodos para la captura de datos de las transacciones y su ingreso en el sistema de información);
– procedimientos durante la ejecución (pasos y acciones emprendidos por los operadores del sistema y, en ciertos casos, por los usuarios
finales que interactúan con el sistema para alcanzar los resultados deseados);
– procedimientos para el manejo de errores (acciones a seguir cuando se presentan resultados inesperados);
– procedimientos de seguridad y respaldo (acciones para proteger al sistema y sus recursos contra posibles daños).
Estos procedimientos deben formularse por escrito y formar parte de la documentación del sistema. Otros objetivos de diseño incluyen:
– proporcionar especificaciones detalladas para el software y asegurar que el sistema proporcione apoyo a las actividades de la empresa y cumpla con los requerimientos de los usuarios finales.
El diseño del software es un proceso y un modelado a la vez. El proceso de diseño es un conjunto de pasos repetitivos que permiten al diseñador describir todos los aspectos del sistema a construir.
A lo largo del diseño se evalúa la calidad del desarrollo del proyecto con un conjunto de revisiones técnicas. El diseño debe implementar todos los requisitos explícitos contenidos en el modelo de análisis y debe acumular todos los requisitos implícitos que desea el cliente. Además, se considera una guía que puedan leer y entender los que construyan el código y los que prueban y mantienen el software.
La importancia del diseño del software se puede definir en una sola palabra: “calidad”, pues es dentro del diseño donde se fomenta la calidad del proyecto. El diseño es la única manera de materializar con precisión los requerimientos del cliente.
Existen criterios que se han establecido para evaluar la calidad del diseño, en ellos se establece que el diseño:
– presente una organización jerárquica que haga un uso inteligente del control entre los componentes del software;
– sea modular, es decir, se debe hacer una partición lógica del software en elementos que realicen funciones y subfunciones especificas;
– contenga abstracciones de datos y procedimientos;
– produzca módulos que presenten características de funcionamiento independiente y,
– que además conduzca a interfaces que reduzcan la complejidad de las conexiones entre los módulos y el entorno exterior.
El proceso de diseño del software exige buena calidad a través de la aplicación de principios fundamentales de diseño, metodología sistemática y una revisión exhaustiva.
La información detallada del diseño se proporciona a los programadores para comenzar la fase de desarrollo de software.
Fuente: Informática I de la facultad de contaduría y administración, UNAM.