Estado de Resultados y los principios de contabilidad generalmente aceptados
– De operación. Se refiere a la actividad habitual de la entidad durante un periodo específico. En este apartado incluimos ingresos por venta de mercancías, costo de lo vendido, utilidad bruta, gastos de operación y utilidad (o pérdida) en operación.
– De no operación. Parte relativa a transacciones derivadas de operaciones netamente financieras (intereses, fluctuaciones cambiarias, ganancias o pérdidas inflacionarias), o de las inusuales o poco frecuentes (por ejemplo, la venta de algún activo fijo). Por último, en esta sección aparece la utilidad (o pérdida) por operaciones continuas antes de impuestos.
– Impuesto sobre la Renta (ISR) y Participación de los Trabajadores en las Utilidades (PTU). Se aplican los porcentajes de ambas obligaciones a la utilidad por operaciones continuas obtenidas en el punto anterior. Una vez determinadas dichas cantidades, éstas son restadas a la misma utilidad por operaciones continuas.
– De operaciones discontinuas. En esta parte son presentadas las ganancias o pérdidas causadas por operaciones que desaparecen o se discontinúan en un segmento de negocios (por ejemplo, una empresa que ya no forme parte de un grupo, un departamento, una línea de productos, etcétera).
– De partidas extraordinarias. Aquí son mostradas las ganancias o pérdidas de las operaciones que no son comunes al giro de la empresa.
– Por efecto acumulado al inicio del ejercicio por cambios en los principios de contabilidad. Este concepto es consecuencia de los cambios en los métodos de valuación y registro empleados por una entidad.
– Utilidad por acción. En este último renglón se presenta la utilidad por acción de las empresas que cotizan en el mercado de valores.
Fuente: Contaduría Básica I de la facultad de contaduría y administración, UNAM.