Evaluación
Los procesos de evaluación se pueden definir, en términos generales, bajo las siguientes coordenadas:
1) sólo se evalúa al estudiante;
2) la evaluación se centra en los resultados;
3) sólo se evalúan los efectos observables;
4) no se contextualiza la evaluación;
5) se evalúa para controlar;
6) se utiliza la evaluación como instrumento de poder;
7) se evalúa para preservar; y
8) no se propicia la evaluación honesta.
En este contexto y desde esta perspectiva, los procesos evaluativos se debaten entre una búsqueda obsesiva de confiabilidad y validez con metodologías que ostentan cierto cientificismo, pero dejando de lado los entornos de la realidad; se obtienen datos estadísticos que se infieren absurdamente excluyendo la realidad social, cultural, histórica, política y económica de las personas e instituciones.
Los conceptos de evaluación apuntan y apuestan a tres vertientes: información + juicios de valor + toma de decisiones, aunque en la práctica lo que predomina es el cúmulo de información –muchas veces mal obtenida y mal medida- para elaborar juicios de valor subjetivizados y luego no tomar decisiones.
Se exponen un par de conceptos:
“Evaluación es el proceso de obtener información y usarla para formar juicios que a su vez se utilizarán en la toma de decisiones” (Terri D. Tenbrink);
“Obtención de información rigurosa y sistemática para contar con datos válidos y fiables acerca de una institución con objeto de formar y emitir un juicio de valor con respecto a ella. Estas valoraciones permitirán tomar decisiones consecuentes en orden a corregir o mejorar la institución evaluada” (María Antonia Casanova).
Las dos definiciones nos llevan a deducir que existe una dinámica entre la “realidad educativa” mediada por el “ideal educativo” para “comparar” y luego “intervenir”; en este contexto, el baremo estándar es determinante para ejecutar una evaluación que nos permita obtener evidencias de la realidad, pero también será fundamental acceder a métodos y estrategias que nos permitan abarcar objetivamente el acercamiento al todo que se pretende evaluar.