Georges Braque
Pintor y escultor francés nació el 13 de mayo de 1882 en la aldea de Argenteuil-sur-Seine, famosa por sus paisajes, pero creció en Le Havre. Su padre era decorador de interiores y junto a él aprendió los secretos de los colores y las combinaciones. En 1900 se instaló en París, donde iba por las noches a la Escuela de Bellas Artes. Se graduó en 1902 y hacia 1907 conoció la obra de los pintores fauvistas, Matisse, Derain, Dufy.
Entre 1908 y 1913 llevó a cabo un exhaustivo estudio sobre los efectos de la luz y de la perspectiva y los medios con los que cuentan los pintores para representar estos efectos. Braque cuestionó la mayoría de las convenciones artísticas en uso.
Picasso, con quien Braque empezó a trabajar en estrecha colaboración a partir de 1909, utilizaba un enfoque pictórico similar. Desde 1910 a 1912 ambos artistas realizaron obras estructuradas en complejas formas geométricas y pintadas con colores neutros, que hoy son conocidas como cubismo analítico. Un ejemplo de este estilo puede encontrarse en Violín y jarra (1910, Kunstmuseum, Basilea).
Los dos artistas comenzaron a experimentar con el collage, técnica de construcción de una imagen a partir de materiales tan cotidianos como hojas de periódicos, etiquetas y trozos de tela. La fértil colaboración entre Braque y Picasso continuó hasta 1914, año en el que Braque se alistó en el ejército francés. Fue herido de gravedad durante la I Guerra Mundial y en 1917 reanudó su carrera artística en solitario.
Tras la guerra, Braque desarrolló un estilo más personal, que se caracteriza por los colores brillantes y la textura de las superficies y, después de su traslado a Normandía, por la reaparición de la figura humana. En esa época pintó muchas naturalezas muertas y escenas de playa. Continuó trabajando y produjo un considerable número de pinturas, obra gráfica y esculturas, imbuidas de una cualidad contemplativa, que gozan de un enorme reconocimiento.
Murió el 31 de agosto de 1963 en París.