Grupo educativo

Educación es el proceso multidireccional mediante el cual se transmiten conocimientos, valores, costumbres y formas de actuar. La educación no sólo se produce a través de la palabra, pues está presente en todas nuestras acciones, sentimientos y actitudes.

Existen tres tipos de educación: la formal, la no formal y la informal. La educación formal hace referencia a los ámbitos de las escuelas, institutos, universidades, módulos, mientras que la no formal se refiere a los cursos, academias, e instituciones, que no se rigen por un particular currículo de estudios, y la educación informal es aquella que fundamentalmente se recibe en los ámbitos sociales, pues es la educación que se adquiere progresivamente a lo largo de toda la vida.

Un grupo educativo le ofrece la posibilidad de que reconozca y revalore lo que ha aprendido en su vida cotidiana, que adquiera otros conocimientos y que participe en la construcción de nuevos saberes útiles en su vida social y laboral.

Como usted ya sabe, el ser humano se educa en la familia; en la convivencia con diferentes grupos sociales; a través de su contacto con los libros y textos diversos; cuando participa en distintas actividades culturales y recreativas, etc.

Cuando las personas conviven con otras en un grupo educativo tienen ya una serie de conocimientos y experiencias valiosas que compartir; por ello se dice que en este grupo fortalecen lo que ya sabían, lo enriquecen con las aportaciones de sus compañeros y educadores y participan con ellos en la construcción de nuevos aprendizajes que les facilita su continuidad educativa.

Lo que se aprende en el grupo educativo lo llevamos a otros grupos sociales como la familia, nuestros amigos y compañeros de trabajo, entre otros, y tenemos la oportunidad de aplicarlo en diversas actividades que realizamos.

En ocasiones es muy fácil observarlo; por ejemplo, la aplicación de las matemáticas se observa cuando compramos, vendemos, medirnos o pesamos; otras veces es menos visible dicha aplicación ya que ésta se realiza a través de formas de pensar y de actitudes que asumimos.

Son muchos los ejemplos que ilustran lo anterior; cuando no tiramos basura porque hemos aprendido a cuidar nuestro ambiente; cuando cuidamos nuestro cuerpo y nuestra salud alimentándonos adecuadamente; cuando respetamos reglas, normas y defendemos nuestros derechos; cuando damos un consejo, o compartimos con familiares y amigos lo que hemos aprendido en nuestro grupo educativo.