La ciencia como actividad metódica
La actividad del hombre de ciencia consiste, en términos genéricos, en recopilar datos, elaborarlos, extraer de ellos conclusiones, confrontar estas conclusiones con otros datos y con el resultado de otras investigaciones, ordenar todas las conclusiones de un modo sistemático y exponerlas con precisión.
Ninguna de estas acciones se cumple al azar, ya que existen procedimientos establecidos para obtener los mejores resultados en cada una de ellas.
Estos procedimientos (o métodos) elaborados a lo largo de la historia de la ciencia, buscan asegurar la seriedad del trabajo científico en general y se encuentran, naturalmente, abiertos a las modificaciones que la experiencia futura aconseje; pero en cualquier caso se considera conveniente observarlos.
Fuente: Metodología del diseño de la U. de Londres.