Mecanismos de defensa del recién nacido
El R.N. nace con una inmunidad mayor a la de niños de edad superior (varicela, sarampión) ya que la ha adquirido de su madre durante el embarazo. Sin embargo paradójicamente la flora intestinal puede provocar trastornos en el R.N.
El sistema inmune humoral del neonato se caracteriza por:
1) Función de barrera de la piel disminuida (delicada, fina y delgada, propensa a la lesión), y de las mucosas.
2) Inmadurez de los mecanismos de defensa (específicos e inespecíficos). Tienen disminuido el sistema del complemento, el mecanismo de fagocitosis, y también están disminuida la cantidad de neutrófilos y de polimorfonucleares.
3) Ig G: Sólo la Ig G pasa al R.N. desde la madre. Este paso le confiere inmunidad al R.N. de enfermedades que la madre ya había padecido.
Esta inmunidad adquirida pasa a través de la placenta, en los tres últimos meses de gestación (esta es la inmunidad humoral pasiva).
4) Ig M: La sintetiza el feto ya en la gestación (al final) y en los primeros días de vida.
Se encuentra aumentada si ha habido una infección.
5) Ig A: Pasa a través del calostro y la leche materna, y protege de infecciones entéricas.
El sistema inmune celular también es deficitario al principio: en concreto en linfocitos T. Esta inmunidad celular empieza a funcionar de forma eficaz a las 2, 3 o 4 semanas de vida.
A los tres meses el lactante empieza a crear su propia inmunidad. En definitiva todo lo anterior hace que el R.N. sea propenso a infecciones.
Clasificación de las infecciones
A) Superficiales
1. Cutáneas
2. Mucosas
3. Oculares
4. Umbilicales
B) Generalizadas
1. Sepsis
C) Órganos o sistémicas
1. Meningitis
2. Artrosis séptica y osteomielitis
Fuente: Apuntes y notas de enfermería materno infantil del Conalep