Navegaciones y descubrimientos del siglo XV

Se conforman, con las nuevas ciudades-estado, las lenguas nacionales: derivadas del latín surgen las lenguas romances (castellano, francés, italiano, provenzal), derivadas del germánico (inglés, alemán, holandés). La literatura se empieza a cultivar en estas lenguas. Se desarrolla la filosofía escolástica que busca, por medio del razonamiento, demostrar las verdades de la Iglesia Católica; su representante: Santo Tomás de Aquino.

En el ser humano del siglo XV alienta un espíritu nuevo. A la concepción cerrada del mundo propia de la Edad Media de Europa occidental, que de alguna manera había regido en los campos de la religión, de la sociedad surge la idea de una liberación nacida principalmente de los ciudadanos.

Se inicia el humanismo que brillará intensamente en el Renacimiento. Movimiento filosófico, artístico y espiritual que se caracteriza por:

– Tener como protagonista al ser humano y su obra.
– Escribir preferentemente en latín.
– Conocer y estudiar los grandes pensadores clásicos (griegos y romanos).
– Emplear un lenguaje cuidado.
– Realizar la crítica razonada y profunda acerca de la Edad Media.

Es en este sentido que podemos ubicar como humanista a Dante Alighieri (1265-1321), ya que parece más un hombre del Renacimiento que un hombre medieval. Este personaje no solamente escribe La divina comedia, obra cumbre de la literatura italiana, sino también participa en la política y tiene dos grandes ideales: el ayuntamiento libre, sistema de gobierno que considera ideal para su ciudad natal; y la separación de los poderes terrenal y espiritual.

Para Dante, ni el rey debería tener injerencia en los asuntos espirituales, ni éste debería tener injerencia en los asuntos temporales y materiales del rey. Estas dos concepciones le valen a Dante Alighieri ser expulsado de su ciudad y ser inhabilitado para ocupar cualquier puesto público. Y así este hombre de espíritu renacentista vaga por Venecia, Pisa y Rávena, donde muere el 14 de septiembre de 1321.

Humanistas como Dante son el poeta Francisco Petrarca (1304-1374) y el primer narrador moderno Juan Bocaccio (1313-1375). Para estos hombres, la antigüedad está simbolizada por la filosofía y por la literatura grecolatinas; pero al mismo tiempo que vuelven sus ojos al pasado, le dan un gran valor al mundo moderno que vislumbran ya.

Nicolás Copérnico, matemático y astrónomo (1473-1543) expone la teoría heliocéntrica: el sol es el centro del sistema solar y la Tierra, uno más de los planetas que lo rodean. Se desconocía, sin embargo, el tamaño real del planeta.

A estas nuevas concepciones se unen el desarrollo en el arte de la navegación y las actividades complementarias a ésta como la elaboración de mapas regionales y planisferios: conocimientos que los árabes habían manejado desde hacía mucho tiempo.

Los avances de la astronomía son los antecedentes de las grandes expediciones marítimas que se llevarán a cabo a partir del siglo XV, principalmente por España y Portugal; al mismo tiempo, de la generalización y perfeccionamiento en los países europeos del Mediterráneo de ciertos inventos como la brújula, la imprenta, el papel y la construcción de embarcaciones, entre otros, que provenían de diferentes países.

El pergamino, realizado con piel de cabra, duro, empleado por los europeos medievales, será sustituido por el papel: procedimiento de origen chino que los árabes trajeron a Europa. Para el siglo XV, la mayoría de las ciudades europeas contaban con fábricas de papel.

A esto se une el perfeccionamiento de la imprenta por el alemán Juan Gutenberg, quien en 1476 imprime el primer libro La Biblia compuesto por dos tomos.

Los adelantos técnicos como la brújula, el astrolabio, la ballestina, contribuyeron a que los navegantes tuvieran mayor confianza y se aventuraran lejos de los litorales conocidos.

La brújula, de origen chino, fue perfeccionada por el italiano Flavio Giogia, quien fija la aguja imantada, pero dejándola en movimiento libre.

El astrolabio, desarrollado por los griegos y difundido por los árabes, permitía observar el movimiento de los astros y su declinación. Y el «bastón de Jacob» o ballestina servía para medir la altura de la estrella polar. Junto con estos avances técnicos, también debemos mencionar los cambios sufridos por las embarcaciones: a la gatera estrecha y que sólo utilizaba el viento en popa, siguió la carabela, ancha, con tres o cuatro mástiles y velas. El timón rotatorio sustituye al timón de remo.

Vasco de Gama llega a la India por la vía marítima. Este joven navegante completa el recorrido de Bartolomé Díaz. Parte del Puerto de Belén, cerca de Lisboa, en 1497. Llega hasta la Isla de Cabo Verde. Dobla el Cabo de Buena Esperanza y llega, por fin, a Mozambique, primer puerto musulmán. Ahí, se encontraban cuatro naves árabes cargadas de piedras preciosas, perlas, especies, oro y plata. Asunto que sorprende a Vasco de Gama, pero que era común para esta parte del mundo: el tráfico por el Índico y por el Archipiélago Malasio tenía mucho tiempo de estar en manos de los navegantes y mercaderes árabes.

Cristóbal Colón descubre, sin saberlo, un nuevo continente. España financia el viaje del genovés Cristóbal Colón. Parte el 3 de agosto de 1492 del Puerto de Palos con una nave y dos pequeñas carabelas: la Santa María bajo su mando; la Pinta y la Niña bajo el mando de Martín y Vicente Pinzón.

El objetivo: llegar a la India, navegando hacia el poniente.

En el cuarto y último viaje de Colón (1502-1504) descubrió la Martinica, Jamaica, y –desde el Golfo de Darién en las costas de Honduras– llegó hasta el Istmo de Panamá. Regresa a Jamaica, pierde las dos últimas naves que le quedaban y vuelve a España donde muere el 21 de mayo de 1506.