Occidente de europa en la edad media

A mediados del siglo IV d. C. los pueblos bárbaros que rodeaban la frontera norte de Roma, fueron empujados por los hunos (procedentes de Asia Central, eran nómadas y se dedicaban a saquear las riquezas de los pueblos dominados) a buscar nuevas tierras donde asentarse. Por lo que a principios del siglo V estos pueblos invadieron los territorios donde años anteriores se había desarrollado el imperio romano de occidente.

Clasificación de los germanos se dividían en dos grandes grupos:

Teutones:

– Francos
– Burgundios
– Sajones
– Anglos
– Lombardos
– Suevos
– Vándalos
– Alanos

Godos:

– Visigodos
– Ostrogodos
– Hérulos

Dichos grupos se establecieron en diferentes regiones:

En estos siglos de choque cultural, la Iglesia fue un elemento que permitió esta fusión de gente y cultura. Dos papas del siglo V, León I y Gregorio I, favorecieron al crecimiento de las comunidades cristianas. Gregorio I fundó la parroquia como un elemento medular de la religión cristiana y favoreció el desarrollo de los monasterios como núcleos de difusión religiosa y cultural entre los nuevos reinos.

En la Edad Media, los monasterios dejaron de ser sólo núcleos religiosos, conviertiéndose también en granjas y talleres, bibliotecas y focos de irradiación de la cultura clásica. La influencia de la cultura romana, propició la formación de nuevos reinos germánicos.

En el siglo VI d. C., países como Italia, España y Galia, los países más romanizados, consolidaron diversos tipos de unidades políticas instituidas con reyes y cortes, establecidas según la antigua tradición.

Cuando parecía que el occidente europeo estaba en vías de transformarse en un gran conjunto cultural germano-romano, estos nuevos reinos fueron invadidos: