Pasos para el proceso de la toma de decisiones
El primer paso consiste en reconocer que existe un problema únicoo que se presenta una oportunidad. Los problemas y las oportunidades resultan de la naturaleza dinámica de factores situacionales y / o de la implantación de programas diversos.
Las medidas del desempeño señalan con frecuencia la presencia de problemas, mientras que el monitoreo de los factores situacionales puede señalar la presencia de problemas y oportunidades.
Un ejemplo puede ser aquel cuando el gerente de mercadotecnia se entera de que la participación de mercado de un producto ha disminuido, o que la competencia introducirá un nuevo producto, o que la demanda primaria para un producto ha crecido más rápidamente que lo esperado, o que una acción gubernamental ha influido en forma negativa en la venta de un producto de la competencia.
En consecuencia, los gerentes tomarán decisiones para resolver problemas o para capitalizar oportunidades.
El segundo paso en el proceso de la toma de decisiones es la definición del problema de decisión. El gerente necesita definir y clarificar los aspectos principales y los factores causales que operan en la situación de decisión.
No siempre es fácil identificar cuáles son las variables fundamentales que están ocasionando problemas y que deben corregirse. En este caso, las técnicas y el personal que realizarán la investigación juegan un papel importante.
Al involucrar la función de investigación en esta etapa inicial del proceso de toma de decisiones, el gerente puede beneficiarse con un planteamiento más efectivo de los problemas y oportunidades, al mismo tiempo que asegura una utilidad más efectiva de la investigación en etapas posteriores del proceso de decisión.
El tercer paso en el proceso de decisión es la identificación de cursos alternativos de acción. Un curso de acción implica el especificar alguna combinación de las variables que se entrelazan en la situación o problema.
«No hacer nada nuevo» o «mantener el statu quo» es un curso de acción tan válido como el efectuar un cambio en las actividades de la organización.
La efectividad de la toma de decisiones gerenciales está delimitada por la calidad de las alternativas consideradas. En consecuencia, es esencial identificar la «mejor» alternativa. El proceso de identificar los cursos de acción es un proceso creativo similar a la primera etapa del proceso de la toma de decisiones.
El gerente y el investigador tienen que buscar nuevas ideas, las cuales provienen del pensamiento creativo e imaginación. Existen diversos enfoques de investigación que pueden estimular el proceso creativo del gerente y ampliar la esfera de las alternativas identificadas.
Los pasos cuarto y quinto en el proceso de decisión incluyen la evaluación de alternativas y la selección de un curso de acción. Para poder tomar una decisión, debe haber por lo menos dos cursos de acción identificados e incertidumbre con respecto a cuál curso de acción maximizará el logro de los objetivos gerenciales.
Si las personas que toman las decisiones están enfrentadas a una situación en la cual existe sólo un curso de acción real y éste es el de no «hacer nada», entonces no existe decisión involucrada, aunque el problema u oportunidad planteados a la gerencia tengan consecuencias muy importantes para la organización.
El paso final en el proceso de la toma de decisiones es la implantación del curso de acción seleccionado. Nuevamente, la investigación suministra los medios para monitorear la efectividad de la acción seleccionada y las variables situacionales que influyen en el desempeño del programa.
Fuente: Apunte Elaboración y evaluación de proyectos de la Unideg