Percepción de los colores
La percepción del color causa asociaciones muy variadas. Algunas de ellas pertenecen al inconciente colectivo y corresponden al contenido simbólico de los colores.
Otras surgen del inconciente individual y no son otra cosa que sensaciones personales que dependen de la naturaleza de la persona y de las experiencias que haya tenido en el curso de su vida y que se relacionen de alguna forma, conciente o inconcientemente con los colores.
Es por esto que al realizar un proyecto de señalética debemos conocer de una manera general a los usuarios y su relación con el color.
Los colores cálidos comprenden la gama del rojo, naranja y amarillo y los fríos están constituidos por el verde, azul y violeta.
Además de su cualidad de temperatura, los colores cálidos tienen como característica que parecen adelantarse y estar más cerca del observador y los fríos parecen alejarse y estar más lejos del observador. Los cálidos se consideran positivos y dan una impresión en los objetos de mayor volúmen y peso al contrario de los fríos que dan un efecto de reducción y ligereza.
En la práctica de la señalización y la señalética es normal usar una combinación de dos ó más colores.
En este caso los elementos separados, uno de un color y otro de otro color no son registrados por nosotros como unidades sino como totalidades.
Las sensaciones que sentimos corresponden a las cualidades psicológicas de cada color por separado y después se sintetizan. Esto es válido sólo cuando las superficies son del mismo tamaño. Si una superficie es más grande, lógicamente se acentúa el efecto de ese color.
Fuente: Apunte de Diseño de Sistemas de Señalización y Señalética de la U de Londres.