Periodo clásico del Altiplano central
La altiplanicie mexicana —también conocida como altiplano mexicano o meseta Central de México— es una región natural de México y Estados Unidos que se extiende hasta el Eje Neovolcánico en el sur. Sus límites oriente y poniente son señalados por la Sierra Madre Oriental y la Sierra Madre Occidental. La altiplanicie mexicana abarca parte o la totalidad de los territorios de los estados de Chihuahua, Coahuila de Zaragoza, Nuevo León, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro Arteaga, Hidalgo, México, Tlaxcala, Puebla, Jalisco, Michoacán, y el Distrito Federal.
En el periodo clásico región central de veracruz la alta cultura olmeca influyó de múltiples formas en la región de Veracruz y en las zonas vecinas de lo que hoy es el estado de Puebla. Este amplio territorio recibe el nombre indígena de Totonacapan que significa «lugar de luz y calor», y es, asimismo, el lugar donde habitaron los totonacas.
Se han realizado estudios en varios sitios de dicha región, entre éstos encontramos las excavaciones hechas en Nautia, Remojadas, Yohualichan y el Tajín. Una característica peculiar del Tajín son sus edificaciones, las cuales se yerguen en una superficie que sobrepasa a las setenta y cinco hectáreas. Muchas de sus construcciones fueron objeto de constantes transformaciones, un ejemplo claro de esto lo observamos en la conocida pirámide de los nichos (que emana del clásico tardío), en la cual se encierra una estructura más pequeña (que es varios siglos más antigua).
Los resultados de las investigaciones realizadas sobre el desarrollo del clásico en Veracruz, no han dejado un conocimiento profundo de la cultura de dicha región, sin embargo, es posible destacar algunos rasgos característicos de la fisonomía cultural de esta área: edificaron importantes centros ceremoniales, debidamente planificados; conocieron y utilizaron los sistemas calendáricos y las formas de escritura; adoptaron el juego de pelota, ligándolo al culto religiosos; y entre sus deidades estaban Huehuetéoti «dios viejo»; Tláloc, conocido por los totonacas con el nombre de Tajín; Quetzalcóati, serpiente emplumada; y otros.
Se han encontrado tres tipos de objetos característicos de la región, los cuales parecen estar asociados con el ritual del juego de pelota. Éstos son unas esculturas en piedra designadas como palmas, yugos y hachas.
Otro tipo de creación típica es la que se conoce como «cerámica de Remojadas» (nombre de la localidad); se trata de cabezas y figuras completas, con sonriente expresión, las cuales han sido interpretadas como testimonio de la alegría de vivir.