1. Medidas de diagnóstico precoz del cáncer (mama, endometrio, cérvix, ovario).
2. Vigilancia periódica de los indicadores bioquímicos, sobre todo del metabolismo de los lípidos e hidratos de carbono; determinación de colesterol y sus fracciones y de la glicemia basal o con sobrecarga.
3. Vigilancia de parámetros clínicos relacionados con el sistema cardiovascular, como la tensión arterial y el peso.
4. Actividades de educación sexual.
5. Actividades de educación dietética.
6. Actividades de ejercicio físico.
7. Intervenciones de apoyo psicológico dirigidas a reforzar la autoestima y la asertividad.
Éstas pueden realizarse a nivel individual o a nivel colectivo; en este segundo caso, la dinámica de grupo introduce un factor de influencia positiva.
Cuidados de enfermería
1. Actuaciones no farmacológicas: aconsejaremos vestimenta transpirable, evitar bebidas calientes, ejercicios de relajación para mejorar los trastornos vasomotores.
Lubricantes y geles hidrosolubles para la sequedad vaginal y evitar la dispareunia. Anticoncepción.
2. Prevención enfermedades coronarias: no fumar, no beber alcohol, no café.
La dieta es fundamental, debe ser 30% grasas y no más de 10% saturadas, 20% proteínas y el 50% hidratos de carbono (aporte energético).
Las grasas se acumulan en los adipocitos y estos metabolizan estrógenos. Recomendar ejercicio físico.
3. Prevención de osteoporosis: ejercicio físico como andar, correr, levantamiento de pesos, que ayudan a fijar el calcio.
También ayudan la vitamina A y K. Dieta rica en calcio: CDR = 1-1,5 gr). Por último, terapia de sustitución hormonal (THS) con estrógenos que dados a corto plazo hacen que los síntomas no sean tan bruscos, o bien se dan a largo plazo.
Pero también los estrógenos dados exclusivamente son perjudiciales para cáncer de mama y de endometrio ya que la mama y el endometrio son estrógeno-dependientes. Para evitarlo se combinan estrógenos y progesterona.
La progesterona disminuye la afinidad de los receptores por los estrógenos, pero disminuye el HDL y aumenta el LDL y los riesgos de enfermedad cardiovascular.
No obstante se ha visto que la progestina (progesterona sintética) palia los efectos del LDL y HDL.
La THS se utiliza sobre todo por vía transdérmica (parches), vía percutánea: gel, también vía subcutánea: implantes subdérmicos; vaginal (anillos, cremas, óvulos), sublingual, nasal e intramuscular.
Por vía oral, produce problemas hepáticos.
La THS ha de realizarse con los controles y seguimientos adecuados.
Fuente: Apuntes y notas de enfermería materno infantil del Conalep