Producción de señales
El mundo de la comunicación actual en el entorno urbano está estructurado por la señal. La eficacia de su función depende del nivel de calidad de su diseño y producción.
No hace mucho tiempo los productores de señales eran diseñadores. Pero la oportunidad y la especialización conspiraron para separar ambos oficios y ubicarlos en diferentes direcciones.
No obstante, las necesidades del mercado hicieron que fuera necesario desarrollar un puente que optimizara la relación entre el diseño y las industrias productoras de señales, con el fin de poder ofrecer una solución integral y eficaz a los clientes.
Un ejemplo de esto es la empresa productora de señales Wood & Wood, situada al oeste del Reino Unido, que fue fundada por John Wood en 1968 y posteriormente consolidada como un negocio de familia.
En sus comienzos se posicionó en el mercado local colaborando con diseñadores, arquitectos y consultores de diseño para la creación de sistemas de señalización estéticos y funcionales.
Revirtiendo los tradicionales roles de los diseñadores y los productores de señales, fue pionera en comisionar a un grupo de destacados diseñadores londinenses para que proyectaran la parte gráfica de las señales para una importante cadena de pubs, un rubro tradicional que proporcionó muchos encargos.
Las señales únicas se convirtieron en una parte redituable del trabajo, a partir de la de nuevas investigaciones e innovaciones, fueron aplicadas en muchos mega-proyectos de señalética.
Con la creciente evolución del mercado se fueron estableciendo nuevas demandas, como el abaratamiento de costos y la necesidad de producción en serie debido a la consolidación del sistema de franquicias de las grandes marcas, frente a lo cual fue necesario plantear ciertas reestructuraciones en la oferta.
Se desarrollaron sistemas de señalización estandarizados de fácil armado cuyas características funcionales y formales dieron una eficaz respuesta a diferentes problemas en diferentes entornos.
Como parte de esta nueva política empresaria también se desarrollaron otras estrategias, como la internacionalización del trabajo y la optimización en los tiempos de producción, que permitieron cumplir con los requerimientos de aquellas empresas con sucursales en distintas partes del mundo.
En función de ello, el marketing de la empresa se organizó en dos grandes grupos: el de los servicios, encargado de manejar el diseño, la producción, la instalación y el mantenimiento de las señales; y el de las distribuciones, que provee el marketing y el servicio local en los diferentes países.
Con el desarrollo de las nuevas tecnologías y el uso de materiales no convencionales, el diseño –tanto gráfico como de construcción– dejó de estar condicionado por la conveniencia de la producción y fue posible concretar las ideas creativas más osadas.
Esto trajo aparejado un cambio formal importante, caracterizado por la versatilidad de las soluciones, y proporcionó una mayor vida
útil al producto.
A los materiales estándar, como el alumin io y las láminas de metal y acrílico, se les sumaron el esmaltado en horno, el dorado a la hoja, la resina, el acero inoxidable, el bronce, el cobre, el hierro forjado, el neón, la fibra óptica y el control electrónico.
Éstos dieron un resultado sorprendente con la utilización de una amplia gama de técnicas como termo-formado, tallado, grabado, routeado, estampado, anodizado, moldeado con revestimiento epoxy, soldado de precisión y corte con láser.
Conscientes de que la calidad del producto depende tanto de los valores técnicos como de una cordial y próxima relación de negocios y una buena comunicación entre diseñadores y productores, la empresa invita a los diseñadores y consumidores finales a trabajar algún tiempo en sus instalaciones mientras se confeccionan los prototipos de sus señales, además de poner a su disposición el asesoramiento de un Departamento de Diseño Técnico encargado de racionalizar e implementar todos los proyectos, en particular aquellos que presentan desafíos técnicos particulares.
De esta manera, los diseñadores se interiorizan de los procesos y problemas que surgen de su construcción, sumándose al trabajo interdisciplinario de obreros, técnicos, ingenieros y dibujantes de planos que cuidan cada una de las etapas de producción de las señales.
Como parte de un nuevo estadio de desarrollo, en la actualidad se apunta a mejorar el nivel de calidad tanto para el marketing como para las instalaciones y el mantenimiento, y se siguen incorporando diferentes técnicas de management que fortalezcan aun más la estrategia comercial que caracteriza a esta empresa.
Lo que cabe destacar especialmente es el trabajo conjunto realizado entre diseñadores y productores para elevar la calidad del producto en un área que ha sido descuidada durante años y que merece particular atención por cuanto forma parte esencial de la imagen que los ciudadanos tienen del entorno, además de poseer una función activa en cuanto a la información y la orientación proporcionada al observador.
De la eficacia de esta tarea entre industria y diseño depende la creación de productos más útiles que contribuyan a elevar la calidad de vida de la sociedad.
Fuente: Apunte de Diseño de Sistemas de Señalización y Señalética de la U de Londres.