Relación de los materiales con el contenido en los envases y embalajes
Bastante obvio y lógico resulta pensar en lo importante que será la relación envase-producto, o sea contenedor-contenido. No será nunca igual la problemática a resolver cuando se diseña una línea de envases y presentaciones para una nueva línea de ropa interior, de cosméticos o de alimentos preparados rehidratables.
Los tres proyectos demandan soluciones diferentes considerando desde los tipos y materiales de envases hasta los medios de impresión utilizables para esos envases.
Sea el caso de diseño de envase del que se trate, se requiere de un material y diseño de envase que cubran todas y cada una de las necesidades, tanto desde el punto de vista de diseño industrial como del gráfico –y uniendo esfuerzos para lograr una sinergia en la comunicación eficiente de los beneficios y atributos de nuestro producto, a lo largo de todo su proceso, requerimientos demandados:
– Por el producto
– Por el usuario
– Por el fabricante
– Por el importador
– Por el exportador
– Por el estibador
– Por parte de la persona que va a llenar los anaqueles
– Por parte de la persona, cajero o cajera, que va a tener que pasar el código de barras impreso en el envase del producto por el lector de rayos infra-rojos, en lugar de teclear, como antes, número por número, los códigos individuales de cada uno de los productos.
Ya hemos hablado del control de producción, distribución y calidad que permite el uso adecuado del código de barras.
En el caso de la ropa interior, desde el punto de vista del producto, requiere protección contra polvo y humedad, es decir que no entre la humedad ni el polvo ya que dañarían el estado del producto y por ende su comerciabilidad.
En la línea de cosméticos se tendrán productos en diversos estados: sólido — polvos y polvos compactos, lápiz labial—, líquido — barniz de uñas, aceites y cremas desmaquillantes, acetona y removedores—, y una mezcla entre ambos — mascara o rimel, lápices labiales, lápices para delinear los ojos, cremas hidratantes, etc.—
En algunos casos se requieren soluciones de envases herméticos que no permitan el intercambio de sólidos, líquidos ni gases entre el interior y el exterior mientras el envase se encuentre cerrado; materiales impermeables y resistentes al agua, bloqueadores de grasa, de solventes, etc.
Para la línea de alimentos preparados rehidratables se necesita un material que, además de ligero, contenga de una manera sellada, materia prima preparada y deshidratada para ser consumida una vez rehidratada y generalmente calentada en horno de microondas.
Todos estos requerimientos estructurales y funcionales además de los de comunicación gráfica, acordes a los beneficios y atributos del producto, sin sobrevenderlo, deberán ser analizados con precisión por el diseñador, antes de poder empezar a emitir juicios, ideas y conceptos de solución.
Fuente: Materia de Diseño de Envases y Embalajes de la Universidad de Londres