Representación de los signos

Sabemos que se necesita un máximo de 4 cifras binarias para poder representar una cifra decimal. En este caso se dice que para representar un número decimal se necesitan como máximo 4 bits. Bites la unidad fundamental de información, es decir, una cifra binaria (0 ó 1), una posición del circuito (abierto o cerrado) o una posición en una cinta perforada (hay agujero o no lo hay). El nombre de bit proviene de la contracción de la expresión inglesa  binary digit, dígito binario.

En cuanto a las letras del alfabeto, así como los signos mecanográficos especiales (p. ej. $, &,%), éstos pueden representarse mediante números binarios. Cuando se juntan ocho números bits formando un conjunto, éste recibe el nombre de byte, que procede de la contracción de la expresión inglesa Binary Term, es decir, término binario. Además cada uno de los bytes contiene, para el control interno, un bit llamado bit de paridad que, sumado a todos los bit   de cada byte, dará siempre un número impar. Por su parte, el byte es la unidad de información más pequeña de la memoria de trabajo a la que se puede asignar una dirección determinada (si bien no es la unidad mínima operable) y por este motivo todos los registros y longitudes de las instrucciones que se manejen deberán ser múltiplos de ella.

Como ya sabemos, el almacenamiento y procesamiento de la información mediante ordenadores implica necesariamente la codificación de los componentes individuales que la constituyen mediante el empleo de ciertas variables binarias.

 

En la mayoría de los ordenadores de uso científico la representación de los números positivos y negativos se logra mediante alguna variación en el sistema binario de numeración. Para este caso, la representación de los números enteros se complementa con la introducción del llamado punto flotante además de la aritmética básica para los números enteros o de punto fijo.

Sin embargo, en aquellos ordenadores que se emplean fundamentalmente para el procesamiento de datos en el área comercial, resulta interesante poder representar y procesar números expresados en base decimal. Para ello se emplea el denominado código decimal codificado en binario (BCD, siglas de la expresión inglesa Biriary-Coded-Decimal).

Para representar cualquier intervalo  de enteros (positivos o negativos) que deseemos, podemos emplear  cadenas de dichos valores en el código de cuatro bits, pudiendo determinar el signo mediante el empleo adecuado de un código de posición de signo.

Dado que tanto el almacenamiento y edición de textos como la  entreda/salida y procesamiento en los lenguajes de alto nivel imponen la necesidad de representar desde la totalidad de los caracteres que forman el alfabeto de los lenguajes naturales hasta operadores de diversos tipos, signos de puntuación y caracteres de control, se emplean, además de los números, diversos códigos para ello.  Los dos códigos estándar a este respecto son el código del American Standards Committe on C

Information Interchange Code (Conocido por sus siglas ASCII) y el Extended Binary Coded Decimal Interchange Code (cuyas siglas son EBCDIC). La versión estándar del primero de ellos consta de siete bits, mientras que el segundo está formado por ocho. Sin embargo, existe una gran cantidad de aplicaciones en las cuales es preferible emplear cantidades compuestas por ocho bits, motivo por el cual el código ASCII estándar se amplía de diversas formas a esta cantidad: o bien se fija en 0 la posición bit de orden superior o bien se emplea uno de los bit como bit de paridad del carácter codificado.

Ambos códigos presentan una serie de características que los hacen muy adecuados para las aplicaciones referidas en ambos los cuatro bits de orden inferior de  los códigos de carácter decimal son iguales a los códigos correspondientes a los 10 primeros números decimales.

Esto significa una clara ventaja, ya que permite la comparación de caracteres que representan dígitos decimales, operación que puede llevarse a cabo con los mismos circuitos lógicos empleados en la  realización de las operaciones aritméticas estándar con los números binarios.

 

Esta posibilidad de comparación es extraordinariamente útil cuando se trata de colocar en orden creciente o decreciente una cadena de números decimales.

Asimismo, esta estructura permite realizar el empaquetamiento de la información, mediante la supresión de 3 ó 4 bits de la izquierda, operación gradas a la cual se logra un fuerte ahorro de espacio de almacenamiento.

En cuanto a los códigos correspondientes a los caracteres alfabéticos, el hecho de que los patrones de hit binarios se encuentren ordenados en secuencia numérica facilita las operaciones de ordenación alfabética.