Reproducción de los mamíferos
La reproducción las gónadas llegan al exterior por conductos independientes a los excretores, sin cloaca (salvo prototerios). En las hembras, el útero desemboca en una vagina y los machos disponen de pene, con fecundación interna. Salvo los prototerios, que son ovíparos, todos son vivíparos, desarrollándose el embrión en el útero y en estrecho contacto con el organismo materno por la placenta.
El periodo de gestación es variable y las crías necesitan del cuidado de sus padres hasta un grado de desarrollo que les permita sobrevivir por si mismos.
El periodo reproductor se caracteriza por cambios físicos y de conducta, de manera cíclica y sujetos a hormonas. El periodo de actividad reproductora de las hembras se denomina estro.
Sistemática de los mamíferos
La clase se divide en dos subclases: los prototerios y los terios. La primera es un orden y la segunda se divide en dos infraclases, los metaterios, con un orden, y los euterios con 16 órdenes.
Los prototerios carecen de dientes y en su lugar tienen pico córneo. Carecen de pabellón auditivo externo y las glándulas mamarias no se reúnen en mamas con pezón, desembocan en la piel.
Tienen costillas en las vértebras cervicales. Las hembras no tienen útero ni vagina y ponen huevos. Poseen cloaca. Son los más primitivos de los mamíferos.
Los terios son vivíparos, las hembras tienen pezones, útero y vagina y las crías nacen en estado de desarrollo diverso. Tienen pabellones auditivos externos y en los más primitivos una cloaca.