Ropkins y las pruebas
En la cima de su carrera, a principios de 1930, Claude Hopkins era el redactor más reconocido de Lord & Thomas, percibía el increíble sueldo de 185 mil dólares.
En ocasiones se le reconoce como el mejor redactor publicitario, o copywriter, de todos los tiempos, también era el más analítico.
Hopkins trabajó con correo directo y utilizó este medio para hacer pruebas y afinar su técnica. En su libro Scientific Advertising, escrito en 1923, trata los principios y las leyes que descubrió como resultado de sus constantes pruebas con textos:
«Un anuncio se compara con otro, un método con otro… No se permite adivinar. Uno debe saber qué es lo mejor. Es por ello que la publicidad por correo establece, en principio, muchas de nuestras leyes básicas».»