Satélites
Está constituido por uno o más dispositivos receptor –transmisor, cada uno de los cuales cubre una franja lo suficientemente ancha de la superficie terrestre obteniendo de esta manera una cobertura global.
Los primeros satélites de comunicaciones se encuentran en órbitas Geoestacionarias o GEO (Geoestationary Earth Orbit – Órbita Terrestre Geoestacionaria), donde la velocidad orbital del satélite es tal que compensa la rotación de la tierra y los satélites se ven como puntos en el espacio.
Características: Estas órbitas son escasas. Los satélites están a 36000 km. de altura sobre el ecuador, por lo que la señal debe recorrer 72000 km. entre subir y bajar al receptor destino.
Una terminal terrestre necesita de mucha potencia para llegar hasta el satélite y grandes antenas para capturar sus señales; por lo que las terminales no serán portátiles.
Para dar solución a estos problemas se decidió utilizar satélites en órbitas más bajas, entre 400 y 1600 km. denominadas LEO (Low Earth Orbit – Órbita Terrestre baja) y a los que están a 10000 km de altura se los denomina MEO (Médium Earth Orbit – Órbita Terrestre Media).
Características: No precisan de potentes transmisores ni grandes antenas de recepción; por lo que un receptor del tamaño de un celular es perfectamente construible. Al estar a menor altura, los retardos de la transmisión son menores.
Al poseer un área de cobertura menor es necesario utilizar muchos satélites para cubrir la superficie de la tierra. Los satélites se mueven respecto del usuario debido a su mayor velocidad para mantenerse en órbita; por lo que cada satélite debe tener la suficiente inteligencia para enrutar sus llamadas a otros satélites o estaciones terrenas.
Fuente: Apuntes de Mercadotecnia y Publicidad de la Universidad de Londres