Sistema de calefacción por aire caliente con circulación forzada

Sistema de calefacción por vapor.

Utiliza el fenómeno consistente en el que el vapor de agua, al condensarse, desprende, además del calor que cede al enfriarse, cierto número de calorías procedentes del calor latente que el agua ha incorporado al vaporizarse.

Esta clase de calefacción posee una inercia calorífica menor que la calefacción por agua caliente y su instalación es menos onerosa. Sin embargo, la elevada temperatura de los cuerpos calefactores aumenta la desecación del aire, las pérdidas del calor en las canalizaciones son mayores y la graduación no resulta tan precisa.

Dichos sistemas se utilizan principalmente para calefacción intermitente, de hospitales, escuelas, etc.

Sistema de calefacción por agua caliente.

Es en la actualidad, la más extendida. El elevado calor específico de agua caliente le permite acumular una importante cantidad de calorías en un volumen relativamente reducido.

Tal calefacción comprende una o varias calderas y cierto número de radiadores conectados entre sí y con la caldera mediante canalizaciones. El circuito puede ser abierto o cerrado, según el tanque de expansión, situado en el punto más alto de la instalación, comunique o no con la atmósfera.

En el primer caso, la instalación se llama de baja presión, y en el segundo de alta presión o de agua sobrecalentada, y sólo puede emplearse para caldear grandes locales o para el transporte de calorías a gran distancia.

Fuente: Apunte de Instalaciones en los edificios del Instituto tecnológico de la Paz