Sistema operativo del ordenador
Si bien hubo una época en la que los ordenadores no disponían de sistema operativo, en la actualidad todos ellos, desde los enormes ordenadores centrales de los centros de cálculo hasta los ordenadores personales que se encuentran en la actualidad en muchos hogares como un electrodoméstico más, disponen del mismo. El sistema operativo crea la imagen que el usuario del sistema informático conoce de él, incluso dominando sobre el propio sistema físico del ordenador.
En un principio, el sistema operativo cumple la función del sistema lógico que gobierna el sistema físico del ordenador, aunque actualmente hay cierta tendencia a desplazar algunas funciones del sistema lógico al físico.
Por lo tanto, consideramos, de un modo más general, que el sistema operativo está formado por los programas, independientemente de donde residan, que ponen a disposición del usuario el poder de computación de las máquinas que constituyen el sistema físico empleado.
El sistema operativo, que, en mayor o menor medida, consume parte de los recursos del ordenador, es una especie de administrador del sistema informático y, esencialmente, del sistema físico.
Se caracteriza por definir el interfase del usuario, permitir que los usuarios compartan el sistema físico y los datos, planificar los recursos a administrar entre los usuarios de una instalación de procesamiento y facilitarla entrada y salida de la misma.
Para ello, el sistema operativo gestiona los procesadores, los procesos de almacenamiento de la información, los dispositivos de entrada y salida y los datos que se procesan.